Raúl Arza, de 50 años, fue elegido ayer nuevo secretario general de UGT Euskadi por el XI congreso. Consiguió 132 votos, un 55,65%, frente a los 108 votos, un 42,74%, de Pilar Collantes, que se presentó a liderar la secretaría general al margen del aparato oficial del sindicato.

Arza llamó a la unidad y destacó, nada más ser elegido, que los militantes de UGT Euskadi deben «llevar al sindicato a los centros de trabajo para aumentar la representación y la afiliación con el objetivo de ser útiles para la sociedad». Prometió ante los delegados del congreso «un sindicalismo en la calle, presente cada día en el centro de trabajo y con los oídos abiertos, con una asesoría económica que vamos reforzar» y adelantó que desarrollarán «una organización transparente, con más autonomía en la toma de decisiones respecto a la organización en Madrid».

Afirmó también que quiere protagonizar «grandes acuerdos para la reactivación económica» para hacer frente al desempleo. También destacó la oportunidad de presionar para cambiar la política fiscal «para que los ingresos permitan mantener y reforzar los servicios públicos en Sanidad, Educación y Servicios Sociales».

Una de las mayores preocupaciones que el nuevo secretario general de UGT Euskadi ha mantenido siempre es la fractura sindical que existe en el ámbito vasco. Tendrá en este momento la oportunidad de dar un paso al frente.

Ocho miembros

Debido a la crisis económica, Arza anunció en la presentación de su candidatura que la ejecutiva del sindicato se reducirá de once a ocho miembros. Repiten tres, el propio Raúl Arza, la responsable de Acción Sindical, Maribel Ballesteros y la de Políticas Sociales, Esperanza Morales. Los nuevos miembros de la ejecutiva entrante son el secretario de Organización y Comunicación, Gustavo García; de Administración y Finanzas, Javier González; y los de las territoriales: en Araba, Arantza Ruiz; en Bizkaia, Tomás Rodero; y en Gipuzkoa, Felipe Javier Pascua.

Además, el nuevo secretario general ya anticipó que solo estará en el cargo durante dos mandatos. Su antecesor, Dámaso Casado, se marcha tras once años al frente de UGT Euskadi, tras sustituir a Carlos Trevilla.

Raúl Arza tiene 50 años y ayer en Barakaldo admitió que «UGT Euskadi planteará «siempre alternativas realistas, posibles y con una actitud responsable».

El nuevo líder de UGT-Euskadi tendrá que hacer frente a un doble desafío, por las consecuencias de la crisis tanto a nivel externo, en los trabajadores, como interno, por la difícil situación económica del sindicato, que ha presentado un expediente de regulación de empleo en el resto de autonomías.

Raúl Arza milita desde 1984 en el sindicato. Es licenciado en Ciencias del Trabajo. Realizó un máster de prevención de riesgos laborales y es especialista en derecho empresarial por la Universidad Politécnica de Madrid. Es técnico de Lanbide.