Herrira se concentró ayer frente al Parlamento de Nafarroa, desde donde trasladó a agentes políticos y sociales y a la ciudadanía en general, la necesidad de que la agenda por los derechos humanos, la resolución y la paz esté presente en el proceso de cambio iniciado en Nafarroa.

«En Navarra hay una mayoría social que quiere superar estos esquemas de enfrentamiento y venganza, que demanda el final de las medidas de excepción y un cambio en la política penitenciaria», manifestaron portavoces del movimiento ciudadano por los derechos de los represaliados, para añadir que «el Parlamento también se debería hacer eco de esa realidad».

«En Navarra tenemos a 81 presos y presas políticas dispersadas, nueve que deberían estar libres tras haber cumplido su condena y cinco con enfermedades graves», subrayaron ante la Cámara navarra, sin pasar por alto que sus familares y allegados se cuentan por miles y todos ellos siguen «girando en la ruleta rusa de la fatalidad de todos los fines de semana».

Concentraciones

Las movilizaciones por el respeto a los derechos de presos y refugiados volvieron ayer, como cada viernes, a decenas de plazas. Hubo concentraciones en Zornotza (98), Amurrio (40), Iruñea (226), Mutriku (40), Lekeitio (117), Beasain (51), Getaria (32), Amara (45), Deba (45), Lizarra (44), Agurain (42), Oñati (90), Legorreta (21), Ondarroa (195), Ugao (59), Lizartza (36), Tafalla (45), Elgoibar (40), Zarautz (185), Zizur (26), Baztan (33), Bergara (42), Orereta (280), Arbizu (35), Algorta (107), Durango (92), Donostia (182), Etxarri (112), Barañain (50), Lezo (39), Bilbo Sabin Etxea (90), Berriozar (50), Bera (18). También hubo movilizaciones el jueves en Antsoain (30), Burlata (68), Arrosadia (19), Donibane (54), Txantrea (49), Iturrama (160) y Eibar (80).