despedida
Adiós definitivo de Ricardo a su etapa como guardameta profesional
N.M.
Fiel a su estilo y rodeado de sus compañeros, Ricardo se despidió del fútbol profesional entre risas y no entre lágrimas, como suele ser lo habitual. A sus 41 años, el guardameta madrileño cuelga las botas tras esta última etapa de medio año en el club rojillo, que podría culminar con su titularidad en el Bernabéu, si Mendilibar lo considera oportuno.
Deja atrás 16 temporadas al más alto nivel -la mitad en Osasuna-, con la esperanza de seguir ligado al mundo del balompié, pero desde los banquillos. «Me estoy for- mando para ser el gran entrenador que voy a ser. En tres o cuatro años se me van a rifar los grandes de Europa y solo se va a hablar de mí», anunció entre las risas de los presentes.
«No dejo yo el fútbol, el fútbol me deja a mí. Con 41 años ya no te quieren. En el Celta hay un portero con 17 años, cómo voy a competir con él. Ni con él, ni con Andrés, ni con Asier (Riesgo). Se recorren la portería en una vez y a mí me cuesta tres veces. Es una realidad», justificó su despedida.
Ricardo mostró su «agradecimiento» a la entidad rojilla «por haberme aguantado durante todos estos años», a la par que a quienes han compartido vestuario con él durante este tiempo. «La vida me ha dado la posibilidad de volver a vivir algo muy bonito este año con Osasuna, aunque se haya sufrido mucho», recordó respecto a la salvación de última hora.
En cuadro
Las ocho bajas del equipo -ayer se sumó la convocatoria de Masoud con su selección- obligan a Mendilibar a tirar de los canteranos para afrontar el último compromiso liguero en el Bernabéu, tras el cual, la plantilla iniciará sus vacaciones.
Así, el central Unai García y el centrocampista Maikel Mesa se ejercitaron con la plantilla, por lo que tienen opciones de jugar de inicio o unos minutos en Madrid.