HUELGA GENERAL 30 DE MAYO
La protesta cierra Aiaraldea y se dejar notar en Gasteiz
Ion SALGADO | GASTEIZ
La huelga general tuvo un seguimiento desigual en Araba. Así, mientras que en Aiaraldea y en la zona oriental de la Llanada la convocatoria, organizada por la mayoría sindical y social, fue secundada por cientos de trabajadores; en Gasteiz la cita no consiguió detener las cadenas de producción de las principales empresas, como son Michelin y Mercedes-Benz (Daimler-Chrysler).
Cabe destacar el impacto de la huelga general en Amurrio, donde, la protesta cerró las puertas de Gometegi, Inauxa, Colsa, Kider y JEZ, entre otras sociedades. Los supermercados más importantes de la zona y alguna que otra sucursal bancaria también decidieron echar la persiana tras hablar con los piquetes informativos.
En Laudio destacó la incidencia del paro en Guardian. Una empresa cristalera, en la que trabajan más de 500 personas, a la que ayer solo acudieron el personal asignado a los servicios mínimos y quince personas más.
La labor de los piquetes informativos estuvo marcada por la presencia de la Ertzaintza, que fotografió y vigiló de cerca a las personas que denunciaban los recortes sociales en los polígonos industriales. Además, identificó a ocho personas en Laudio y Amurrio. Entre las mismas figuran dos periodistas de la web Aiaraldea.com.
Otra vez El Corte Inglés
En Gasteiz los piquetes informativos cortaron a partir de las 05.30 de la mañana las entradas a los polígonos industriales de la capital. Utilizando sus vehículos como herramienta, los trabajadores bloquearon las rotondas de Gamarra, donde tuvieron que intervenir los bomberos para apagar el incendio declarado en el remolque de un camión. Cerca de allí, en Betoño, la policía autonómica identificó a diez jóvenes.
Horas después, a partir de las 10.00 de la mañana, las columnas informativas comenzaron a recorrer las calles de la ciudad. Como viene siendo habitual, la Ertzaintza se encargó de blindar los exteriores de El Corte Inglés, que abrió sus puertas entre pitidos y protestas. Frente al citado centro comercial, Ignacio Funes (ESK) criticó la actitud «preponte y chulesca» de la policía autonómica, que, según denunció, no respetó los permisos de las centrales sindicales, a las que impidió transitar por la parte trasera del edificio.
Tras las primeras protestas, los congregados iniciaron una larga marcha de dos horas por las calles del Ensanche gasteiztarra. Una procesión marcada por las reclamaciones laborales y sociales, que finalizó a las 12.00 del mediodía en la plaza Bilbao, donde se dieron cita todas las columnas sindicales. Desde allí partió una gran manifestación que concluyó a las 13.30 horas en la plaza de la Virgen Blanca.
Por la tarde fue el turno de los agentes sociales que, con menos apoyos, recorrieron las calles de la ciudad para mostrar su rechazo a los recortes impuestos por los gobiernos de Madrid y Gasteiz.
En cuanto a la incidencia de la huelga en Gasteiz, los sindicatos convocantes destacaron que algunas empresas, como es el caso de Alestis, cerraron por la huelga general. En el sector público, los centros cívicos de Hegoalde, Ariznabarra o el Campillo, dependientes del Ayuntamiento, permanecieron cerrados.
Fuera de Gasteiz, la huelga se dejó notar en la zona industrial de Agurain, donde permanecieron cerradas las factorías de Wind Energy Casting Fundiciones y Arcelor Salvatierra; en Iruña Oka, donde Beretta Benelli tuvo que paralizar la fabricación de armas; y Legutiano, donde se ubica la empresa CIE Gameko.
En la zona rural, unos desconocidos cortaron el transporte ferroviario entre Iruñea y Gasteiz a la altura de Iruraiz-Gauna, un municipio situado cerca de Agurain.