Bera Bera
La Champions en el alero...
Bera Bera debería confirmar su participación antes del 10 de junio, y a día de hoy carece de recursos.
Juan Carlos ELORZA
«¿Mi impresión? Que no vamos a jugar la Champions». Fernando Diez Mintegi, presidente del club Bera Bera, contestaba de manera sincera y tajante a una pregunta durante la comparecencia junto a la responsable de la sección de balonmano, Tati Garmendia. «Hoy por hoy, la Champions nos aleja del equilibrio [entre lo deportivo y lo económico], y no queremos morir de éxito. Los últimos campeones de Liga prácticamente han desaparecido y, aunque sea una faena tener que renunciar a algo tan importante y que te has ganado, la cabeza debe mandar sobre el corazón al tomar este tipo de decisiones. El corazón dice que sí, pero la cabeza que no».
Bera Bera tiene de plazo hasta el próximo 10 de junio para formalizar su participación en la próxima Champions League. A diferencia de la pasada temporada, en la que el subcampeonato le permitió participar en la fase previa (en la que cayó, para reengancharse posteriormente en la Recopa), esta vez el título de Liga le permite acceder directamente a la fase de grupos, con 6 partidos a disputar entre el 5 de octubre y el 16 de noviembre, ante tres de los mejores clubes del continente. «Haremos todo lo posible para participar -aseguraba Diez Mintegi-, pero todo pasa por encontrar un patrocinador en los próximos días».
El presidente del club donostiarra añadía que, de cualquier forma, Bera Bera estará presente en Europa la próxima temporada. La renuncia a disputar la Champions en los plazos previstos le permitiría participar en la Copa EHF, aunque ni Diez Mintegi ni Garmendia ocultaban que ello supondría una decepción y un retroceso, pero al mismo tiempo insistían en que «solo gastamos lo que tenemos».
La participación en la máxima competición europea lleva aparejados unos gastos extraordinarios que el club no puede asumir en la actual coyuntura de recortes económicos, principalmente la obligatoriedad de instalar una pista especial para cada uno de los partidos («la pista azul», solo con señalización para balonmano, que debería montarse y desmontarse al menos tres veces en el Josean Gasca -Bidebieta no reúne las condiciones exigidas-), o la exigencia de que el club garantice la producción de señal televisiva para cada partido en Donostia.
Al incremento de los gastos hay que añadir la cortedad de la plantilla, que podría resentirse con una competiciòn tan exigente. «Ya la pasada temporada hubo que renunciar a cubrir una de las bajas que había tenido la plantilla por recortes en el presupuesto», recordaba Garmendia. «Con la lesión de Cuña volvimos a considerar esa posibilidad, pero la descartamos».
En este momento, la baja de Zoqbi en la portería ha sido cubierta con Ana Temprano (procedente de Zuazo), pero no las de Eider Rubio y Libe Altuna. «La prioridad es fichar una primera línea», subrayaba Garmendia, aunque este objetivo tampoco es fácil, porque los recursos son muy limitados.
La combinación de una plantilla corta con la concentración de partidos en los dos primeros meses de competición podría poner en peligro incluso el objetivo principal de la próxima temporada, volver a aspirar a ganar la Liga, otro factor que debe valorar, y mucho, el club.
Antes de detallar las dificultades con que se encuentra Bera Bera para poder acudir a la Champions, Fernando Diez Mintegi y Tati Garmendia destacaron la gran temporada realizada por el equipo -«histórica»-, que aportaba el primer título de Liga para un conjunto del club donostiarra, acompañado del «triplete» con la Supercopa y la Copa, subrayando que se trataba del premio a la calidad y el duro trabajo de las jugadoras y el equipo técnico, con Reyes Karrere al frente, «que ha supuesto la guinda del pastel tras 23 temporadas en la elite».
Diez Mintegi se mostró igual de satisfecho con los resultados de la «Liga económica, tan complicada de disputar como la otra, ya que se ha logrado equilibrar el presupuesto y este año no hemos generado déficit». Tras explicar que el equipo ha visto descender su presupuesto en cerca de 200.000 ¤ en los dos últimos ejercicios sin sponsor («de 900.000 a los cerca de 700.000 de la última campaña»), y la dependencia casi exclusiva de las instituciones, Diez Mintegi señaló que «la buena gestión también deber ser valorada, sobre todo cuando vemos que al mismo tiempo otros clubes han llegado a desaparecer».
Respecto a la próxima temporada, las subvenciones sufrirán nuevos recortes, salvo la del Ayuntamiento donostiarra, que mantendrá la aportación de la última campaña. «Pero el Gobierno Vasco rebajará su aportación ordinaria en un 30% -detallaba Diez Mintegi-, y aún no sabemos exactamente en qué se materializará el recorte que también nos han anunciado en la Diputación».
Tati Garmendia explicó que estos ajustes a la baja han influído en las condiciones que habían podido ofrecer a las jugadoras, a quienes agradecía su comprensión para adaptarse a las circunstancias. «Hemos quitado primas, ofrecido sueldos a la baja, en los pisos que hasta ahora compartían dos jugadoras ahora vivirán tres... E incluso algunas jugadoras han renunciado a primas que les correspondían por contrato».
Diez Mintegi hizo mención especial a Reyes Karrere, a la que calificó como un importante «activo del club», y desveló que le han realizado una propuesta para que siga prestando sus servicios «al club, y al balonmano guipuzcoano», desde un puesto similar a una dirección técnica. Tras alabar las cualidades que Karrere ha mostrado en su trayectoria en el equipo, Diez Mintegi apuntó que debían aprovecharse «para que Bera Bera se sienta no solo en Donostia, sino también en otros clubes de la provincia, y que pudiera aportar su experiencia en la faceta técnica, de promesas...». La ya exentrenadora ha pedido un tiempo para poder considerarlo. J.C.E.