El fundador del portal WikiLeaks, Julian Assange, famoso por denunciar los excesos y abusos del poder, cumplió ayer un año refugiado en la embajada de Ecuador en Londres, sin visos de que su caso tenga una solución a corto plazo.

El 19 de junio de 2012, el informático australiano, de 41 años, entraba en la legación diplomática ecuatoriana como refugiado para impedir que las autoridades británicas le deportaran a Suecia, donde es requerido por supuestos delitos de agresión sexual. Assange denuncia ser víctima de una persecución política y que detrás de las denuncias se esconde una trama para ser entregado a EEUU.

Su arresto vino precedido de las revelaciones de WikiLeaks sobre actividades bochornosas de EEUU y otros países, lo que le convirtió en símbolo de la defensa de las libertades civiles, algo que ahora comparte con el exempleado de la CIA Edward Snowden, que ha denunciado un ciberespionaje que afecta a millones de personas.

Sin salvoconducto

Sin poder salir de la embajada porque sería inmediatamente detenido, Assange exige que Londres le conceda un salvoconducto que le permita abandonar el país rumbo a Ecuador. Ante la falta de avances y la negativa de Londres, los Gobiernos británico y ecuatoriano han acordado crear una comisión de juristas.

Assange fue detenido en Londres el 7 de diciembre de 2010 a petición de Suecia, por lo que se inició un largo proceso legal que terminó el 30 de mayo de 2012, cuando la Corte Suprema, máxima instancia judicial británica, dio luz verde a su extradición. Durante el proceso judicial, el antiguo hacker vivió bajo arresto domiciliario en una mansión en el este de Inglaterra de un amigo suyo y debía llevar consigo dispositivos electrónicos para controlar sus movimientos

Determinado contra los abusos del poder, este periodista nacido en Townsville (Australia) fue uno de los fundadores del grupo International Subversives. En diciembre de 2006 puso en marcha el portal WikiLeaks, con el objetivo de arrojar luz sobre el autoritarismo creciente de los Estados, tanto de los considerados regímenes dictatoriales como de los países occidentales. Pero la relevancia de la página aumentó entre julio y octubre de 2010 al publicarse en numerosos periódicos documentos secretos de las guerras de Afganistán de Irak (2003), filtrados por el soldado estadounidense Bradley Manning, que está siendo juzgado por una corte marcial.