Algunos se resisten a ver la realidad, pero lo que resulta más patético es el empeño con el que pretenden que los demás la ignoren. Ayer «La Razón» ofrecía un ejemplo, uno más, en exclusiva, tras lo que se supone una ardua -y obsesiva- investigación.

El diario de Marhuenda llevaba a primera página esa «investigación»: «Mas se rodea de afines a Batasuna para impulsar el pacto soberanista». Servidora se imaginaba al presidente de la Generalitat compareciendo junto a militantes históricos de la formación ilegalizada, pero no se trata exactamente de eso. En páginas interiores, bajo el habitual cintillo que reza «La ofensiva nacionalista: el proceso soberanista», aseguraba que Mas «está convencido de que sólo rodeado de una gran mayoría social y política puede llegar a celebrarse la consulta y, para eso, ha citado a 25 entidades el próximo 26 de junio en el Parlament con el fin de escenificar que hay una mayoría de catalanes que quiere decidir su futuró político». El caso es que la hay, aunque no le guste a «La Razón». Y continuaba diciendo que entre esas entidades, «si no se produce un veto de última hora, estará presente ARRAN, una organización que agrupa a jóvenes colectivos identificados con el independentismo revolucionario». Y ahora llega el gran descubrimiento de «La Razón»: «Entre éstos figura Maulets, histórico aliado de las sucesivas juventudes batasunas (Jarrai, Haika y Segi)». Lo aclaraba en un despiece: «Aunque Maulets se disolvió hace un año, su huella sigue presente dentro del colectivo ARRAN, con el que comparte su ideología fundacional: el independentismo catalán y la izquierda revolucionaria», y afirmaba que «históricamente ha dado «su apoyo a las juventudes abertzales por sus sucesivas ilegalizaciones después de que la Justicia las considerara parte del entramado etarra». Como otras muchas organizaciones sociales, sindicales y políticas vascas, catalanas, del Estado español y de todo el mundo. Claro que para «La Razón» quien no está de acuerdo con la vergonzosa deriva ilegalizadora y los abusos del Gobierno español es «etarra».

Resumiendo, una organización disuelta, cuya «huella» sigue presente en otra que apoya la consulta catalana junto con otras muchas, como la Coordinadora de Asociaciones por la Lengua, sindicatos como CCOO y UGT o patronales como Pimec, todas ellas reconocidas «batasunas», «rodea» a Mas para que el titular de «La Razón» tenga sentido.