La delegada de la Agencia Estatal de Meteorología Aemet en la CAV, Margarita Martín, hizo ayer balance de lo que va de año y adelantó también cómo esperan que sea el verano, que comienza hoy mismo. Indicó que la primera mitad de la estación tiene «mejores expectativas» que la segunda, ya que a partir del 10 de agosto es «muy posible» que vuelva a llover «más de lo normal», es decir, por encima de los 315 litros por metro cuadrado de media que se registran en los tres meses estivales.

En definitiva, Martín anunció un verano de «un mes o mes y medio», muy parecido al de 1984. Julio tendrá una temperatura normal, mientras que agosto será más frío. Junio ha sido más frío de lo habitual -un grado más bajo- y hasta fin de mes no va a calentar.

Respecto a 2013 lo definió como «el año de las efemérides»: el 18 de mayo, en Hondarribia se contabilizó la precipitación máxima, con 108 litros; y el 6 de abril, en Urizaharra, a 1.500 metros de altura, la temperatura máxima más baja, cinco grados bajo cero.

Este año hidrológico (que se computa desde el 1 de octubre de 2012 hasta octubre de 2013) será, al menos en Gipuzkoa, el más lluvioso desde 1913.

Según explicó la delegada de Aemet, esto se debe a la ubicación del anticiclón de las Azores, que este año está al norte del archipiélago, una coyuntura que se produce de forma cíclica cada 30 años y que provoca dos o tres años de precipitaciones por encima de la media.

Fiesta suspendida

En Baiona, se ha suspendido la fiesta de la música, Musikaren Besta, la celebración que se hace en Ipar Euskal Herria para dar la bienvenida al verano. Tomaron esa decisión debido a las intensas lluvias que se esperan, para preservar la seguridad. En Biarritz estaban estudiando qué hacer. Por otra parte, las inundaciones provocaron problemas en el transporte ferroviario: cortaron una vía en la línea Baiona-Hendaia y nueve trenes que iban de Bordele a Hendaia permanecieron en la estación.