La presidenta del PP vasco, Arantza Quiroga, se pronunció ayer sobre la corrupción, pero no para referirse a los episodios que salpican a su partido, sino para asegurar que se trata de un problema que afecta a todos los partidos por igual.

Durante su intervencion en el XIV Congreso de Nuevas Generaciones de Bizkaia, Quiroga afirmó que la «secuencia insoportable y obscena» de corrupción política que se ve a diario no es del PP, PSOE, PNV, Bildu o UPyD sino que «es un problema que afecta a todos por igual». En opinión de la presidenta del PP vasco, la corrupción está ligada al poder y afecta «a todos los que tienen poder».

A este respecto, consideró que el mejor antídoto contra la corrupción y los corruptos es «la claridad y la transparencia». «El control frente a la opacidad y el desconocimiento para impedir que esta lacra se extienda como una tinta de calamar que nos mancha a quienes nos dedicamos a la política con honestidad», añadió Quiroga.

Sin citar a Bárcenas

Sus declaraciones llegan en una semana muy marcada por esta cuestión. En el ámbito estatal, por el encarcelamiento de Luis Bárcenas, que fuera tesorero del PP y a quien al parecer Quiroga olvidó citar. Una de las acusaciones que se le dirigen es pasar sobresueldos con dinero de procedencia sospechosa a numeros cargos del PP, algunos de ellos vascos.

En Euskal Herria también se han producido estos días noticias como la revelación de la Diputación de Gipuzkoa en las Juntas Generales de la aparición de gastos sin justificación de los anteriores gestores del PNV en una caja de facturas de Bidegi.

La intervención Quiroga fue en la línea de la que realizó el jueves en el Parlamento de Gasteiz su compañero de filas Borja Sémper, que también trató de generalizar la cuestión e impregnó su discurso de un aparente tono de indignación.