Tanques, vehículos militares y personal del ejército bloqueaban el acceso a las calles de Urumqi -ciudad de más de dos millones de habitantes-, cuando falta una semana para el aniversario de los disturbios étnicos de 2009 que se saldaron con unos 200 muertos en esa misma ciudad, en los incidentes más sangrientos desde la Revolución Cultural

Para sorpresa general de la población, hacia las 19.00, hora local, miles de hombres armados con cascos y uniformes de camuflaje ocuparon el centro de Urumqi, apoyados por vehículos blindados y bloqueando el acceso a la plaza central en la que desarrollaron el ejercicio.

«Nunca he visto nada parecido», declaró un habitante de la ciudad a France Press.

El ejercicio, que no pudieron ver los habitantes concluyó a las 20.30.

El ejercicio fue llevado a cabo por miembros de la Policía Armada del Pueblo, que forma parte de las fuerzas armadas encargadas de hacer cumplir la ley y de la seguridad en tiempos de paz.

Semana de incidentes

«El Gobierno regional se prepara para responder a cualquier eventualidad al acercarse el cuarto aniversario» de las revueltas, según había anunciado el diario «Global Times». Además de la víspera del aniversario de los sucesos de estas ciudad, la demostración de fuerza se produce al término de una semana de violentos sucesos.

Más de cien activistas, tildados de «terroristas» por las autoridades, atacaron el viernes a unos habitantes de la región de Xinjiang, de predominio musulmán, donde los disturbios causaron 35 muertos el miércoles, según el diario estatal «Global Times» Los atacantes actuaron en la ciudad de Hotan, donde «atacaron a numerosas personas con armas después de concentrarse en lugares de culto», indicó el diario. El artículo no indica cuántas personas murieron o resultaron heridas en estos nuevos ataques.

Los «terroristas, en motos, utilizaron cuchillos como armas y atacaron una comisaría», según esas informaciones, que citan a unos testigos e indican que la situación está «bajo control».

El miércoles, una multitud armada con cuchillos atacó al amanecer varias comisarías y edificios oficiales de la pequeña ciudad de Lukqun, a unos 250 kilómetros al sureste de Urumqi, la capital regional, y a unos 3.000 kilómetros al oeste de Pekín. La agencia calificó de «terroristas» estos incidentes, que se producen cuando la semana que viene es el aniversario de los disturbios que en 2009 enfrentaron en Urumqi a hanes, la etnia mayoritaria en China, y a uigures, la población de lengua turca local, dejando unos 200 muertos.

En esa región desértica del noroeste de China viven unos 10 millones de personas pertenecientes a la minoría étnica uigur, mayoritariamente musulmana.