Ana Isabel Núñez Romero, de 41 años y residente en Errenteria, ingresó a las 14.15 del lunes en el Hospital Donostia con «lesiones de máxima gravedad» que activaron el protocolo ante una posible muerte por violencia sexista. Falleció a las 10.30 de ayer «por causas naturales», según un informe provisional de los forenses que realizaban la autopsia.

Tras conocerse este extremo, el Ayuntamiento de Errenteria suspendió el pleno y la concentración posterior, que habían sido convocados a mediodía después de que el Departamento de Seguridad comunicara al Gobierno local que se había activado el protocolo ante la muerte de una vecina del municipio posiblemente como consecuencia de la violencia machista.

«Desde el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco se nos informa de que tras la realización de la autopsia se considera que la muerte se debe a causas naturales», indicó el Consistorio en una nota, en la que señalaba que «ante estas informaciones» se ha decidido «posponer por cautela tanto el pleno extraordinario como la concentración hasta que se aclaren todas las circunstancias».

Aun sin confirmación oficial de que se tratase de una muerte violenta, la alusión del Departamento de Seguridad a un posible caso de agresión machista que la Ertzaintza estaba investigando, junto a la detención del compañero de la víctima, en dependencias policiales a la espera de la autopsia para que se le tomase declaración, dio lugar a una cascada de comunicados de condena por parte de instituciones, partidos políticos y hasta instancias como Emakunde o la oficina del Ararteko, desde donde se facilitó, incluso, la identidad de la vecina fallecida.