EH Bildu propuso ayer al PNV utilizar la mayoría de dos tercios que suman en el Parlamento de Gasteiz para superar el bloqueo que PP, PSE y UPyD han impuesto al proceso de paz y normalización. Se trata, según expusieron sus portavoces, de «convertir la mayoría social en mayoría política» en la Cámara.

El llamamiento de EH Bildu coincide con las declaraciones conocidas el pasado miércoles tras la primera reunión oficial entre PNV y Sortu, en la que ambas fuerzas se citaron para en setiembre continuar analizando los posibles pasos a dar en el camino de la búsqueda de la paz y la lucha contra el proceso de recentralización en el que se ha instalado el Gobierno español.

El análisis del independentismo es que la posición el Estado no es pasajera, sino estructural, y que compromete tanto al PP como al PSOE. Y que no cabe esperar nada de ninguno de los dos partidos ni en Madrid ni en la CAV, puesto que la formación de Arantza Quiroga se debe a lo que mande el Gobierno de Rajoy y Patxi López en estos momentos está hipotecado por su intención de intentar suceder a Alfredo Pérez Rubalcaba.

Desde EH Bildu se sostiene que el Gobierno de Iñigo Urkullu -que en un principio había optado por la vía de lo «políticamente correcto, lo formal y lo discreto» para lograr una posición de interlocución privilegiada con el Ejecutivo de Mariano Rajoy- ya se ha dado cuenta de que «ese camino no conduce a ninguna parte», puesto que Madrid lo ha entendido como «un cheque en blanco» que le ha llevado a reforzar su posición inmovilista. Tanto el lehendakari como el PNV dan por hecho en la actualidad que esa puerta está cerrada.

«Reto prioritario»

EH Bildu considera que en los próximos meses es prioritario dar un impulso al proceso de paz y normalización en base a la mayoría social y política existente en Euskal Herria. «El reto -como afirmó Julen Arzuaga en rueda de prensa- es convertir la mayoría social en mayoría política en el Parlamento».

La posición inmovilista de PP y PSE «hace imposible llegar a consensos plenos», que sería lo deseable en este campo. En consecuencia, la coalición apuesta por «activar la mayoría política, en línea con la mayoría social, para forzar al Gobierno español a moverse y dar pasos y salir de la actual situación de bloqueo».

Arzuaga recordó que en la propia Ponencia de Paz y Convivencia ya se tomó la decisión de trabajar por el sistema de mayorías. Y se limitó a constatar que las fuerzas abertzales suman prácticamente las dos terceras partes de la Cámara autonómica y que «todavía no ha explorado toda su potencialidad».

La portavoz del grupo, Laura Mintegi, aclaró que actuar por mayorías no exime al PP y PSE de su responsabilidad de moverse y de aportar al proceso.

Colaboración en otros ámbitos

En cuanto a la actividad parlamentaria en el inicio de la legislatura, EH Bildu mostró su satisfacción por «haber puesto de manifiesto que sí hay alternativa, que sí hay un modo de hacer otras políticas, pasando por encima de inercias del pasado, para evitar las medidas impuestas por Madrid». Laura Mintegi añadió al respecto que, ante cada recorte, EH Bildu ha puesto sobre la mesa medidas alternativas, evidenciando que, si hay voluntad, las políticas sociales y económicas pueden ir en otra dirección.

Mintegi ofreció colaboración al Gobierno de Urkullu porque en Madrid «hay una estrategia global en contra de Euskal Herria que necesita una respuesta también global, de país; hagamos juntos ese camino, porque es un error dar respuestas puntuales a lo que es una estrategia general».

No obstante, criticó también la debilidad del Ejecutivo de Lakua ante la crisis, puesto que «ha empezado tarde a moverse y ha dado prioridad a su propia estabilidad más que a la necesidad de un acuerdo de país». Mintegi reprochó al lehendakari que no haya activado la mayoría abertzale del Parlamento frente a Rajoy, ya que, según dijo, «en vez de apoyarse en la mayoría social, ha preferido ceder a las imposiciones de fuera».