EH Bildu de Ezkerraldea hizo ayer balance del trabajo desarrollado por sus concejales en los ayuntamientos de Santurtzi, Portugalete, Barakaldo y Sestao en los dos años de legislatura transcurridos. La coalición destacó que «las ganas y la ilusión por cambiar la política de nuestros municipios» se ha traducido en una oposición «responsable, constructiva y demostrando que tenemos alternativa a este sistema», frente a los gobiernos de PNV y PSE, que «siguen utilizando la política y la economía al servicio de la banca, de las grandes empresas, de sus amigos y, cómo no, de sus propios bolsillos».

Los ediles de Bildu consideran que su llegada ha supuesto la presencia de una oposición que prácticamente no ha existido en los ocho años anteriores, «intentando superar la falta de información y el oscurantismo» y planteando un modelo alternativo al empeño en «crear una Ezkerraldea de escaparate, cueste lo que cueste».

En un repaso por la realidad de cada municipio, apuntaron a los resultados de una gestión que ha dejado, por ejemplo, una deuda de 25 millones de euros en Santurtzi.