En una jornada sin referencias macroeconómicas, el Ibex cerró ayer la sesión con un avance del 0,29%, pero no consiguió alcanzar la cota sicológica de los 8.000 enteros y cerró en 7.966 puntos. En Europa, la bolsa de París cotizó al alza, con un 0,29%, mientras que Londres cayó el 0,11% y Fráncfort cerró plana, con una caída del 0,01%. En la jornada de ayer, el mercado seguía especialmente pendiente de la presentación de resultados de las grandes empresas que cotizan en Bolsa y también de la subasta del Tesoro que se celebra hoy, la última del mes, y que los expertos esperan positiva, en línea con la de la semana pasada. El mercado también se dejó arrastrar por la incertidumbre en Portugal. La presión sobre la deuda soberana de este país caía con fuerza después de que el Ejecutivo cerrara la crisis política con la confirmación en el poder del actual Gobierno conservador. En EEUU, Wall Street abrió la semana con una leve tendencia bajista. Dentro del Ibex, Acciona se convirtió en el mejor valor de la jornada, con un repunte del 3,48%, seguido de Banco Popular (+2,81%), Bankinter (+1,92%), Acerinox (+1,89%) y Telefónica (+1,32%), que se impulsaron al cierre ante la posible compra de la filial alemana de KPN. En el lado de los perdedores se situaron BME, que se dejó un 2,14%, Amadeus (-1,37%), Dia (-1,34%), Arcelor Mittal (-0,9%) y Ferrovial (-0,89%). Salvo BBVA (-0,31%) e Inditex (-0,19%), el resto de los grandes valores consiguieron mantener el tipo y cerrar en verde, de modo que Repsol ganó un 1,08%, Endesa un 0,55%, Iberdrola un 0,44% y Banco Santander un 0,42%.