crónica | denuncia por racismo en gasteiz
«Pido una disculpa y el mismo respeto que cualquier persona»
Jamileth García, una gasteiztarra de origen cubano, ha presentado una reclamación en la oficina de Consumo por el trato recibido en una tienda de su ciudad. «Te hacen sentir como una mierda», señala tras explicar que en varias ocasiones ha sido vigilada de cerca nada más entrar en un local de la franquicia Natura y que una de las empleadas defendió esta actitud por tratarse de una negra.
Nerea GOTI
«Nunca me había sentido así». Es una de las reflexiones en alto de Jamileth García ante los micrófonos de la prensa, ayer en Gasteiz, tras exponer un relato que se inicia hace casi un año, cuando entró con una amiga en un establecimiento de la franquicia Natura de la calle San Prudencio y se percató de que una empleada hizo una seña a otra para que las vigilara. La primera reacción de las clientas fue salir de la tienda. Pero, ya fuera, Jamileth pensó que no había razón para que les trataran así y volvió para dejar claro que «por el mero hecho de ser negra no quiere decir que entre a la tienda a robar».
Según su testimonio, meses más tarde volvió al mismo establecimiento, porque le gustan los artículos y la política de la franquicia en cuanto a colaboración en proyectos de cooperación e interculturalidad. «Me pasa lo mismo, me vuelven a seguir y me marcho más indignada y dolida», contó. Y hubo una tercera vez, el pasado 24 de julio, en la que la indignación se disparó y dio lugar a una reclamación ante Consumo y ante SOS Racismo.
Relató que en esta ocasión había quedado con otra persona y en esa espera volvió a cruzar la puerta de Natura. «Estuve durante minutos dando vueltas por la tienda sin que nadie me molestara, hasta que apareció otra vez la misma trabajadora», añadió. Resaltó que esta vez oyó perfectamente a la dependienta decir a otra compañera: «Cuidado que ahí está la negra». Pidió hablar directamente con la encargada y una hoja de reclamaciones que le fue negada, por lo que recurrió a la presentación de la queja en Consumo, que se resolverá en cuestión de días. La gasteiztarra comenta que en el calor de la discusión tuvo que oír a la empleada que «está en su derecho de seguirme por ser inmigrante, negra y por la pinta que tengo».
Denunciada por la tienda
Ella reclama una disculpa que se presenta difícil a la luz de los últimos acontecimientos. Personal de la tienda en cuestión señaló ayer a GARA que Jamileth García «está denunciada por el establecimiento», aunque no quisieron aclarar el objeto de esa denuncia.
La misma Jamileth contó ayer que ha hecho llegar su queja a la sede de la franquicia en Barcelona, donde asegura haber recibido un trato correcto. No ocurrió lo mismo cuando el domingo recibió la llamada de la encargada de la tienda. «Si ustedes roban, roban, y te pido por favor que no vuelvas a entrar a la tienda, porque tengo reservado el derecho de admisión», le exigió, según contó ayer.
«Yo lo único que pido es una disculpa y que me digan qué pinta tengo y el motivo por el que no puedo entrar a esa tienda», señala con brío, decidida a seguir adelante y hasta acudir a a los juzgados llegado el caso. «Ser negra no es un delito y estoy muy orgullosa de serlo. Ustedes se ponen al sol, yo no», comentó a los medios visiblemente dolida por unos hechos que no piensa dejar pasar. «Nunca me he sentido así aquí», reiteró, tras precisar que lleva más de 20 años en Gasteiz.
Desde Sos Racismo anunciaron que acompañarán a esta gasteiztarra «hasta donde sea posible legalmente» y manifestaron que este no es un caso aislado y que el racismo no siempre es visible. Lo que a su parecer no prospera es la sensibilidad social, «entender que o todos somos personas o no lo somos», plantearon.