Mañana Larrabetzu vivirá una nueva edición de su celebérrimo y veterano Gazte Eguna, una fiesta que aunque nacida al amparo del histórico local Hori Bai cuenta con la participación de juventud llegada de todos los rincones de Euskal Herria.

La confraternización entre cuadrillas del país (con la comida popular -14.30- y las Olimpiadas que disputarán diversos gaztetxes) y la música siguen siendo el santo y seña de la jornada.

El ejercicio, la escalada, dará comienzo a la jornada que irá calentando motores gracias a los trikitrilaris del pueblo, la comida popular y el kantaldi de sobremesa. Más adelante, a las 17.30, darán comienzo las Olimpiadas.

A las 23.00, antes del festival noturno, se celebrarán la kalejira y el acto político.

En Gazte Eguna el aspecto musical se ha cuidado todos los años. Cabe recordar que los primeros festivales que se organizaron no contaron siempre con el agrado municipal, por lo que se libraron alguna que otra disputa. No obstante, los festivales salieron adelante siempre con gran afluencia de público y con los grupos más emergentes del momento. Este año el cartel mantiene la filosofía de Gazte Eguna y ofrece las actuaciones de Itziarren Semeak, Iheskide y Governors. Los primeros han dejado de ser la promesa de sus inicios para convertirse en una de las formaciones eje de las fiestas de verano con una equilibrada mezcla de ska, estribillos punk, ritmos medios y pegadas rápidas. Iheskide mezclan con fuerza el rock guitarrero, el punk y el rock zapatillero. Además, ambas formaciones sacuden al sistema. Desde Arrasate llega Governors. Pocas, muy pocas formaciones de corte entre el rock y el metal alternativo contemporáneo tienen tanta fuerza, estribillo y clase.