El ascenso de Alavés y Eibar podría beneficiar a un tercer equipo. Pese a que los cachorros no pudieron culminar con éxito el play-off, el Athletic tiene bien cerca a dos escuadras dispuestas a asumir el papel que, en los últimos años, han protagonizado en cierta medida otros conjuntos como Mirandés o Numancia. Aprovechar la calidad de las jóvenes perlas rojiblancas y ofrecerles a cambio la posibilidad de foguearse en una categoría superior a la del filial, peleando por los minutos que tienen muy complicados en el primer equipo rojiblanco.

Ernesto Valverde ya ha comunicado a Unai Albizua, Iñigo Ruiz de Galarreta y Jonás Ramalho que la cesión puede ser su mejor opción para los próximos meses y puede que, al menos los dos primeros, no tengan que recorrer demasiados kilómetros para abrazar su nuevo destino. Parece evidente en el caso del central vizcaino. El Alavés está muy interesado en hacerse con los servicios de Albizua, incluso han existido ya contactos, y la confirmación de Valverde de que no cuenta con él esta temporada parece convertirse en el billete definitivo a Ibaia.

No es el caso del otro jugador rojiblanco pretendido por los albiazules, que pujaban en este caso con el Eibar. Erik Morán se había covertido en el objeto de deseo de ambos, incluso habían existido ya contactos con Ibaigane, pero Valverde adelantó el sábado que el centrocampista sí seguirá a sus órdenes una vez iniciada la Liga. Pero al mismo tiempo que cerraba esa puerta, el técnico abría otra, la de Iñigo Ruiz de Galarreta. Aunque se trate de un jugador diferente, Alavés y Eibar también verían con buenos ojos la incorporación del centrocampista, que los azulgranas ya habían ansiado en campañas anteriores. A favor de estos jugaría, indudablemente, el hecho de que Galarreta sea, precisamente, eibartarra.

Menos posibilidades tiene Jonás Ramalho de recalar en alguna de las dos escuadras vascas en Segunda A. Los gasteiztarras tienen bien cubierto el puesto con Óscar Rubio y la incorporación de otro exrojiblanco, Unai Medina, tras su excepcional papel con el Barakaldo. Algo similar sucede con el Eibar, que ha renovado a otro hombre forjado en Lezama, Eneko Bóveda, al que se ha unido el fichaje de Lillo, procedente del Alcoyano.

Refuerzos

Al margen de lo que suceda con los descartes del Atheltic, alaveses y guipuzcoanos deben ampliar aún su nómina de refuerzos. Sobre todo el cuadro albiazul que, más allá de que alguno de los cinco jugadores del filial que trabajan con el primer equipo pueda aprovechar la oportunidad, apenas tiene 17 jugadores en el plantel, los nueve que continúan de la temporada pasada y los ocho futbolistas que ha fichado este verano.

Más amplia es la plantilla del Eibar, que también se ha reforzado con ocho jugadores, pero que mantiene a 14 de los que lograron el ascenso. Con todo, los azulgranas buscan competencia en tres puestos, lo que, con toda seguridad, abrirá la puerta de salida a un par de futbolistas, por medio de cesión o traspaso.