Sindicatos temen «nuevos ataques» contra los trabajadores tras el verano
Tras las propuestas del FMI y la CEOE para reducir los salarios y modificar la legislación laboral a fin de introducir más flexibilidad en salarios y jornada, los sindicatos temen que tras el verano el Gobierno español ahonde en los ajustes en un «nuevo ataque» contra los trabajadores. Advierten de que ello incrementará la precariedad, al tiempo que auguran un aumento de la conflictividad en un panorama ya de por sí ajetreado después de la última reforma laboral.
GARA | DONOSTIA
Las recientes noticias procedentes tanto de Europa, por parte del FMI y la Comisión Europea, como del Estado español, concretamente de la patronal CEOE, hacen sospechar a los sindicatos que se avecina un otoño movido en el que podrían imponerse nuevos ajustes que den otra vuelta de tuerca a una reforma laboral que ya ha trastocado notablemente las condiciones laborales de los trabajadores.
La propuesta de rebaja salarial del organismo dirigido por Christine Lagarde, o la petición de más flexibilidad de la patronal, son a juicio del sindicato LAB «una ofensiva mediática por parte del poder económico que no tiene otro objetivo que ir preparando el terreno para un otoño en que realizar nuevos ataques contra la clase trabajadora».
En concreto, el FMI consideró «recomendable» reducir un 10% los salarios como medida para «aumentar la contratación». Una propuesta que recibió el visto bueno del vicepresidente de la Comisión Europea, Olli Rhen. A ello se suma la petición realizada el jueves por la patronal española para contar con más flexibilidad salarial y de jornada. Entre otras cuestiones, solicitó que se amplíe del 15 al 30% el margen de horas complementarias legales, la posibilidad de imponer contratos a tiempo parcial a trabajadores contratados a jornada completa o más facilidades para el contrato de formación «con independencia de la edad» o donde la edad sea «lo suficientemente amplia». Todo ello porque la CEOE cree que la última reforma laboral no fue lo suficientemente «ambiciosa».
Órdenes de la patronal
Ante este panorama, LAB advierte de que «es intrascendente que la élite política se muestre en desacuerdo en un primer momento», puesto que, en su opinión, «todo sigue un guión fijado» y, al final, el Gobierno español «dispondrá según lo que le ha ordenado la patronal», quien aseguró que es la que «da las órdenes».
Respecto a los gobiernos de Gasteiz e Iruñea, apuntó que «acatarán y se limitarán a declaraciones tibias, tal y como han jugado frente a la reforma laboral». Es por ello que la central augura un otoño ajetreado, en el que, según apunta, la conflictividad seguirá «aumentando exponencialmente».
Por su parte, el secretario general de CCOO de Euskadi, Unai Sordo, declaró ayer que las propuestas de la CEOE pretenden «generalizar la precariedad en el empleo y el poder de decisión unilateral».
Ante las peticiones de los organismos financiero y empresarial, Sordo no descarta que el Ejecutivo de Mariano Rajoy proceda en las próximas fechas a una modificación de la reforma laboral para introducir sus propuestas, aunque confió en que «no vaya por ahí».
LAB cree que el Gobierno español «dispondrá según lo que le ha ordenado la patronal». Respecto a los ejecutivos de Gasteiz e Iruñea, apunta que «acatarán y se limitarán a declaraciones tibias».
Una bajada de salarios agravaría aún más la situación de los españoles y perjudicaría las ventas de los autónomos y pymes al reducirse el poder adquisitivo de los ciudadanos, según denuncia la Federación de Organizaciones de Profesionales, Autónomos y Emprendedores (OPA).
Por ello, rechaza «totalmente» una reducción de los salarios y exige la puesta en marcha de actuaciones que mejoren la financiación e inyecten liquidez a los autónomos y a los consumidores para facilitar el crédito al consumo.
Asimismo, la federación incide en la necesidad de implantar los mecanismos necesarios para recuperar el consumo interno en el Estado español, que encadena 36 meses de descensos interanuales consecutivos, con el fin de mejorar la situación económica. El presidente de la federación, Camilo Abiétar, subraya que autónomos y pymes representan el 90% del tejido empresarial español y que dos terceras partes de la economía española dependen del consumo interno, por lo que reclama a las administraciones públicas la puesta en marcha de medidas «reales y eficaces» para incentivar el consumo. Subraya que es la única manera de que muchos negocios no se vean obligados a cerrar, por lo que insiste en que no se devalúen más los salarios. GARA
