14º Campeonatos del mundo de atletismo
El atletismo busca aire fresco en Moscú tras un verano caliente
Moscú será la capital mundial del atletismo durante nueve días, escaparate de un deporte asociado en los últimos tiempos a las malas noticias, que suelen ser las de mayor trascendencia. Lesiones y sanciones han mermado seriamente la lista de participantes, pero afortunadamente la temporada ha tenido momentos estelares en varias de sus disciplinas. Bolt es mucho Bolt, pero hay más vida alrededor.
Miren SÁENZ | DONOSTIA
El Estadio Olímpico Luzhniki, sede de los Juegos Olímpicos de 1980, acoge desde hoy hasta el domingo 18 la decimocuarta edición de los Campeonatos del Mundo de atletismo. Por sus pistas y pasillos desfilarán estos días 1.974 atletas, pero solo uno concitará todas las miradas.
Usain Bolt, el mejor velocista de todos los tiempos, no parece impaciente por enmendar aquel enorme despiste que le dejó sin título mundial en Daegu'2011, donde una salida nula en la final de los 100 metros le costó la descalificación. Si antes ya parecía jugar en otra liga, ahora que los únicos que podían hacerle cosquillas se han quitado de en medio, su batalla quizás se centre en igualar a Carl Lewis, el más laureado del certamen, en número de medallas. No anda lejos. El Hijo del Viento se colgó 10 medallas -8 oros, una plata y un bronce- y el Relámpago tiene 7 -5 de oro y 2 de plata-. Con subir al podio por el 100, 200 y el relevo 4x100 ya habrá empatado con el estadounidense. El otro objetivo, mejorar sus récords, es mucho más complicado. Esta vez ni siquiera tendrá para apretarle a su compatriota Yohan Blake, lesionado y uno de los 11 campeones del mundo que no defenderá su título.
El uso de sustancias prohibidas para mejorar el rendimiento y las lesiones ha dejado medio huérfanas las carreras más mediáticas. Tyson Gay, el hombre más rápido del año en el hectómetro, cuya gran temporada auguraba su momento cumbre en el duelo ante Bolt, dio al traste con esa posibilidad a causa del positivo más sonado.
Un verano nefasto para la velocidad con la caída también del explusmarquista Asafa Powell, Veronica Campbell-Brown o Sherone Simpson. En medio de este panorama, Bolt ha tenido que responder a muchas preguntas sobre dopaje en sus últimas comparecencias. Como Chris Froome en el último Tour, repite como un mantra que está limpio, ante la insistencia de los periodistas o de algunos atletas que -como el saltador Reif- han cuestionado sus logros, y la actitud de un público que le adora.
Hoy tendrá ocasión de comprobarlo, puesto que el astro jamaicano cerrará la jornada inaugural con la primera ronda en el hectómetro.
Jamaica, la cantera de la velocidad, se ha visto sacudida en los últimos tiempos por un auténtico terremoto. No han sido los únicos. El dopaje, un asunto global que no entiende de nacionalidades, ha salpicado ampliamente en lo que va de verano a keniatas, turcos, rusos... y ha copado la actualidad del atletismo en un verano caliente mientras momentos hermosos, como los protagonizados por el pertiguista Lavillenie o el saltador de altura Bondarenko, intentando acercarse a los viejos récords de Bubka y Sotomayor, no han tenido el mismo eco.
Moscú permitirá a sus participantes hablar en el tartán o en el pasillo de los saltos y demostrar si el actual mapa del atletismo sigue vigente. Los caribeños han dominado en las últimas grandes citas internacionales el territorio de la velocidad. Especialmente Jamaica, muy activa en todos los frentes, ellos y ellas, en individual y en relevos, pero también la perla de Granada, Kirani James; República Dominicana con Santos y Félix Sánchez o Cuba, que acude con 24 atletas, y algunos de ellos presentan sólidas candidaturas como la pertiguista Yarisley Silva -subcampeona olímpica en Londres, y al frente del ranking mundial por sus 4,90 metros- o el triplista Pichardo, líder con 17,69.
Campeones que sí están
Ellos pueden seguir alegrando a sus pequeñas islas y de paso poner freno al potente y siempre numeroso equipo de Estados Unidos que compite con 135 atletas, entre ellos nueve campeones del mundo. Defienden título Carmelita Jeter (100 metros), Jenny Simpson (1.500), Lashinda Demus (400 m. vallas), Brittney Reese (longitud), Jason Richardson (110 m. vallas), Christian Taylor (triple salto), Jesse Williams (altura), Dwight Philips (longitud) y Trey Hardee (decatlón). Se han ganado el puesto además cinco plusmarquistas, la misma Jeter y Allyson Felix, ambas por el relevo 4x100, Jennifer Shur (pértiga bajo techo), Asthon Eaton (decatlón) y Aries Merritt (110 vallas).
El reto de Rusia es doble. A pequeña escala quieren demostrar su capacidad organizativa a seis meses de los Juegos Olímpicos de Invierno que se inauguran en febrero en Sochi. En el estadio es otra de las grandes potencias, juega en casa con un equipo encabezado por Yelena Isinbayeva, la gran dama de la pértiga en busca de un último impulso que le permita brillar ante su público y retirarse tranquila.
Saltadores de altura como Ivan Ukhov y Anna Chicherova, o sus implacables marchadores, figuran entre los favoritos. Los anfitriones presentan una selección con garantías.
En el fondo y el medio fondo manda África. Su dominio es tan evidente que en Europa empiezan a plantearse abandonar las carreras y probar con los saltos y los lanzamientos, las pruebas técnicas, para recuperar la ilusión por las medallas. Hoy, en la primera jornada, habrá ocasión de comprobarlo. El maratón femenino, dentro de las inmensas posibilidades de los 42,195 kms, enfrentará a la actual campeona mundial, la keniata Edna Kiplagat, con la olímpica, la etíope Tiki Gelana. La victoria de Kiplagat, de 33 años, le convertiría en la primera mujer que repite. El triunfo de Gelana, de 25, supondría el primer oro para su país en el maratón femenino. Hay más opciones, algunas tan interesantes como la de la keniata Kabuu, que ha corrido en 2.19 y ha volado en medio maratón.
En los 10.000 metros masculinos el gran favorito es el inglés -aunque nacido en Mogadiscio- Mo Farah. Doble campeón olímpico, va a ser el hombre más controlado de la carrera. Hace dos años se le escapó el oro por centésimas.
Hoy se disputan las dos primeras finales con el maratón femenino, a partir de las 12.00, y el previsible duelo Kenia-Etiopía. Los 10.000 metros masculinos tendrán la primera aparición estelar de Mo Farah (16.55). También se inicia el decatlón.
El récord del mundo, carísimo de batir en el atletismo, se paga con 75.000 euros, mientras la Federación Internacional de Atletismo subvenciona cada medalla de oro individual con 45.000 euros, la plata sale por 22.500 y el bronce por 15.000.
La IAAF asegura que los 2.000 participantes pasarán controles sanguíneos. Si se detectan valores anormales por el pasaporte biológico serán sometidos a controles de orina, un trámite para los integrantes del podio y a los que les toque por sorteo.
La retransmisión de los Campeonatos del Mundo ha estado en el aire hasta hace unos días, temiéndose que no se diera como Daegu'2011. Teledeporte y el canal en alta definición TVE HD retransmitirán en directo las principales pruebas.