Serena Williams busca su decimoséptimo título del Grand Slam desde hoy en el US Open, que durante las dos próximas semanas ocupará las pistas de Flushing Meadows. La tenista estadounidense lo ha ganado en cuatro ocasiones, si obtiene el quinto igualará con Roger Federer -que peleará por el sexto-, y se quedará a un solo título del récord de Chris Evert.

La menor de las hermanas Williams se coronó por primera vez en las pistas duras de Nueva York en 1999, con 18 años. Repitió en 2002, 2008 y 2012. A punto de cumplir 32 años - el 26 de setiembre-, si levanta el trofeo sería la jugadora más mayor relevando a la australiana Margaret Court, que ganó el título en 1973, con 31 años y 55 días.

Tras ganar este año Roland Garros y otros 7 títulos individuales, Serena lleva 14 meses inolvidables con 77 victorias y cuatro derrotas, en los que ha incluido los títulos de Wimbledon y US Open en 2012 junto al oro olímpico. La retirada del circuito de Marion Bartoli, la francesa que ganó Wimbledon, y sobre todo la baja de Maria Sharapova, debido a una lesión en su hombro derecho, allanan el camino de la americana, que tendrá a Victoria Azarenka -que le ganó recientemente en la final de Cincinnati- como su mayor oponente, aunque la propia bielorrusa ha declarado que ve muy difícil repetir.

Arruabarrena ante Hampton

En el cuadro femenino también figura Lara Arruabarrena. La tolosarra tendrá un primer enfrentamiento complicado por la condición de cabeza de serie de su adversaria, la estadounidense Jamie Hampton, que llega como la favorita número 23.

Rafael Nadal, Novak Djokovic, Andy Murray e incluso Roger Federer aspiran al triunfo en el torneo masculino aunque Djokovic ha apuntado al mallorquín como el máximo favorito. Todos tienen un motivo. Djokovic, en calidad de número uno, Nadal (2) por ser el mejor jugador del año, Murray (3) porque defiende el título y Federer (7) porque ha ganado cinco títulos.

Nadal, que el pasado año vio el torneo por televisión, lleva una gran temporada en la que solo ha cosechado tres derrotas, y ha ganado nueve torneos. Vencedor en 2010, un triunfo le catapultaría al número 1 de la ATP. Desbancaría del puesto a Djokovic si alcanza la final y el serbio cae antes de cuartos, o si Nadal gana el título y el actual líder pierde en semifinales, o antes.

Andy Murray podría apuntarse su segundo grande del año. El escocés que conquistó Wimbledon, sin embargo, no ha cosechado grandes resultados desde entonces. Federer, vencedor de 2004 a 2008, es una incógnita. Esta temporada ha probado, sin suerte, a cambiar de raqueta por una más grande de cabezal, para volver más tarde a la original arrepentido. Ha sumado dos torneos de tierra (Gstaad y Hamburgo) e intenta recuperar espacio. El torneo repartirá casi 37 millones de dólares, tres millones más que el pasado año, con 2,6 millones para los ganadores de cada cuadro. Hasta los que no logren ganar su primer partido se llevarán 32.000 dólares solo por participar.