El ministro heleno de Finanzas, Yannis Sturnaras, reconoció la posibilidad de que Grecia pueda necesitar nuevas ayudas financieras, aunque sostiene que este apoyo, que no superaría los 10.000 millones de euros, no estaría vinculado a condiciones. En unas declaraciones publicadas ayer por el diario "Proto Thema", Sturnaras señaló que «en caso» de que Grecia pueda necesitar un tercer programa de ayuda, este rondaría los 10.000 millones de euros, es decir, será sensiblemente menor a los dos primeros rescates que sumaron 240.000 millones de euros. El ministro hizo hincapié en que en este caso «no se puede hablar de un nuevo memorando, sino de un paquete de ayuda financiera sin nuevas condiciones» que vayan más allá de los objetivos fijados hasta 2015. En cualquier caso, Sturnaras rechazó categóricamente la posibilidad de una quita de la deuda, si bien no descartó una reestructuración de la misma, que se traduciría en la negociación de una ampliación del plazo de amortización de la deuda y una reducción de las tasas de interés.