REAL 0

ATHLETIC 1

La balanza se desnivela del lado rojiblanco. La tercera edición de la Euskal Herriko Kopa fue a parar a las vitrinas del Athletic, donde ya luce el primer trofeo. La Real, ganadora el año pasado, deberá esperar al próximo para intentar volver a poner las tablas en esta particular carrera.

En cualquier caso, lo cierto es que las diferencias se han ido estrechando claramente entre ambas escuadras desde que Euskal Herria Kirola pusiera en marcha esta iniciativa. Si el primer título se lo adjudicaron las bilbainas por goleada (4-1), el triunfo de las donostiarras un año después fue más ajustado (2-0) y el choque de ayer se decidió por la mínima, gracias a un gol de Manu Lareo.

También es cierto que el partido pudo haberse roto antes, aunque del mismo lado, porque las ocasiones más claras durante el primer tiempo le correspondieron al equipo de Juan Luis Fuentes. Ya a los cinco minutos de juego, Sokoa tenía que estirarse para enviar a córner un buen cabezazo de Nekane. Al cuarto de hora, la jugada era para Eunate, pero no encontraba rematadora. Después le tocó a Arranz con un cabezazo y, a solo dos minutos del descanso, la opción fue triple, pero ni Nekane, ni Murua, ni Izaskun acertaron en el remate a puerta.

Con el descanso llegó el carrusel de cambios habitual, lo que frenó un tanto el ritmo del encuentro, hasta entonces tan disputado como siempre suelen serlo los encuentros entre donostiarras y rojiblancas. Pero curiosamente, también fue entonces cuando llegó el único tanto de la tarde. Fue Manu Lareo la que elevó el balón para colarlo en la portería txuriurdin, defendida entonces por Cristina Cornejo.

Se sintió más cómodo el Athletic ante una Real a la que le tocaba reaccionar. Y lo hizo el equipo de Unai Gazpio, que no anduvo muy lejos de restablecer el empate. Su ocasión más clara la firmó Herrero, con un remate que Guarrotxena envió a córner a 20 minutos del final.

No entró, el tiempo se fue agotando y el Athletic acabó celebrando la victoria. En dos semanas, las mismas protagonistas volverán a verse las caras en el terreno de juego, esta vez con los tres primeros puntos de la Liga en disputa.