El ministro de Interior israelí dice que no aceptarán las fronteras de 1967
GARA |
El ministro de Interior israelí, Gideon Saar, aseguró ayer que en las conversaciones con la Autoridad Palestina (ANP), Israel no aceptará regresar a las fronteras de 1967, anteriores a la ocupación de Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este.
Saar consideró inaceptable regresar a las divisorias de 1967, en un eventual acuerdo de paz porque «esas líneas no son fronteras defendibles», señaló en una ceremonia con motivo del Año Nuevo judío, que se celebra la próxima semana, informó el digital israelí «Ynet».
Los palestinos exigen que las líneas de armisticio vigentes antes de la Guerra de los Seis Días sean la base de las fronteras del futuro estado palestino, sobre las que se acordarían intercambios territoriales para permitir que varios de los grandes bloques de colonias judías en Jerusalén Este y Cisjordania queden bajo soberanía israelí.
El ministro Saar aseguró, además, que los negociadores israelíes «insistirán en quedarse con un Jerusalén unido y no dividido como capital de Israel», en rechazo a la exigencia palestina de establecer en Jerusalén Este la capital de su futuro Estado.
Respecto a las colonias, rechazó de plano la exigencia palestina de evacuarlas y señaló que no cree «en desarraigar comunidades judías» y no piensa «que eso vaya a llevar a la paz».
Saar considera que el Gobierno no podía rechazar participar en las conversaciones que impulsa Washington por «responsabilidad internacional» y por «la necesidad de salvaguardar todos los intereses de Israel».
Este diálogo, sin embargo, no es una continuidad del llevado a cabo bajo el Ejecutivo de Ehud Olmert (cuyo equipo negociador también encabezaba la actual ministra de Justicia, Tzipi Livni), ya que, según Saar, la parte israelí «llega a las negociaciones con nuevas posiciones».