Las lluvias torrenciales que cayeron el miércoles durante varias horas en Bamako, de 2,5 millones de habitantes, dejaron al menos 34 muertos, según un nuevo balance comunicado ayer por un responsable de las operaciones de rescate. «El balance se agravó esta mañana (por ayer). Hay 34 víctimas mortales, los daños materiales son numerosos y hay una evaluación en curso», declaró. El anterior balance era de 23 muertos. Los servicios de meteorología informaron de que el nivel de agua alcanzó los 85 milímetros el miércoles en la estación de referencia de la capital, cuando, según un especialista, la media máxima es de en torno a 50 milímetros en temporada de lluvias. Las fuertes corrientes de agua arrasaron viviendas enteras, construidas en su mayoría con adobe.