Tercera derrota ante un rival muy superior
Los rojillos, blandos en defensa y sin mordiente en ataque, siguen sin sumar ni un punto. El Villarreal mostró los argumentos que le han llevado a lograr justo lo contrario: ganar los tres partidos disputados.
OSASUNA 0
VILLARREAL 3
Asier AIESTARAN
Osasuna sigue con su casillero de puntos a cero tras sumar su tercera derrota liguera e igualar el mal comienzo de la temporada pasada. Los rojillos fueron superados de cabo a rabo por un Villarreal que supone la otra cara de la moneda, un equipo que ha firmado el mejor inicio de su historia con nueve puntos en tres jornadas disputadas.
El conjunto navarro sigue sin ver portería, sin acercarse a ella prácticamente, y el agujero que que la pasada campaña se logró tapar con una defensa férrea, parece que este curso no va a ser tan fácil de disimular. Por si había alguna duda, un gran Villarreal, magníficamente dirigido por Marcelino García Toral, se encargó de dejarlo claro.
José Luis Mendilibar apostó finalmente por el «multiusos» Oier Sanjurjo para suplir al lesionado Marc Bertrán en el lateral derecho y dejó en el banquillo a Damià. Además, De Las Cuevas y Armenteros salieron de inicio a pesar de los problemas físicos que habían venido arrastrando durante la semana. El otro jugador tocado, Álvaro Cejudo, no fue de la partida.
Por parte del Villarreal, se confirmó que Giovani Dos Santos no iba a ser titular, toda vez que el mexicano, gran fichaje de los amarillos para la presente temporada, pasara toda la semana entre algodones. Jonathan Pereira y el ariete francés Jeremy Perbet formaron la dupla de ataque, mientras que Trigueros entró en lugar de Pina.
Comienzo esperanzador
Los primeros minutos de Osasuna fueron bastante esperanzadores. La vuelta de Armenteros a la media punta dio cierto aire al equipo y los dos intentos iniciales fueron de la escuadra navarra, con un disparo alto del jugador argentino y un remate de cabeza de Oriol Riera a centro del número nueve rojillo.
Los de mendilibar se afanaban en presionar lo más arriba posible, con la zaga muy adelantada, y Aquino fue el primer visitante en avisar de los riesgos de la apuesta. El mexicano se marchaba en un contragolpe de media docena de rivales para ceder a un Perbet que no acertó ni a controlar ni a rematar.
Y, tras un córner sacado por Armenteros que prolongó Riera y no pudo rematar por poco Arribas, comenzó la debacle en El Sadar. Cani y Jonathan Pereira volvieron a avisar antes de que Perbet marcara el primer gol de la noche, tras un buen centro del propio Pereira y una empanada considerable de Arribas y Andrés Fernández en la marca.
Apenas ocho minutos después, Bruno volvía a meter un balón en profundidad a Pereira, una auténtica pesadilla anoche para la desafortunada zaga rojilla, para que Aquino terminara de concretar la ocasión ante la salida de Andrés. La grada terminaba de exasperarse con su equipo y se escuchaban los primeros pitos, neutralizados a su vez por los gritos de ánimo que llegaban desde los fondos.
La primera reacción de Mendilibar fue quitar al «gato» Silva del campo en el descanso para dar entrada a Damià, pasando a Oier desde el lateral derecho al centro del campo. La cosa no fue a peor, pero tampoco hubo una mejoría palpable. De hecho, y aunque la posesión seguía siendo rojilla, el Villarreal seguía gozando de las mejores ocasiones.
Y pudo ser peor
Primero fue Bruno el que remató arriba un córner con toda la portería para él, mientras que poco después Cani no encontró el momento para disparar a puerta en una jugada con la defensa osasunista vendida una vez más. La salida de Roberto Torres fue el único revulsivo de toda la segunda mitad, y un disparo suyo a puerta tras internarse en el área rival, la única aproximación real de peligro.
Lejos de conformarse con el resultado, Marcelino puso en juego a Giovani, Pina y Uche, tres jugadores que dan buena idea de la calidad que posee la plantilla del Villarreal. Y nada más salir al campo, Uche marcaba el tercero del «submarino amarillo» al finalizar una excelente jugada colectiva de contragolpe con pase final de Gio.
Era el minuto 75, todavía quedaban 15 de partido, pero los primeros aficionados rojillos comenzaban a desfilar en la grada y la decepción comenzaba a tomar forma. Los intentos finales de Sisi y Loties, cuyo disparo desde fuera del área despejó Asenjo de manera acrobática, no hicieron más que alargar la agonía de un Osasuna que ha comenzado la Liga con mal pie. No queda más que unirse ante la adversidad y reaccionar antes de que sea demasiado tarde.