debate en las instituciones vascas sobre fiscalidad
La reforma de Barcina pasa por bajar impuestos a las empresas
La presidenta navarra busca «aprovechar al máximo el régimen fiscal foral» para que las empresas y los inversores encuentren «las mejores oportunidades» con la modificación planteada. Considera, por el contrario, que la recuperación del Impuesto de Patrimonio perjudica a los navarros
GARA | IRUÑEA
En una comparecencia ante los medios, Yolanda Barcina avanzó que en los próximos meses el Gobierno de Nafarroa va a trabajar en el diseño de una reforma fiscal «integral», cuyo objetivo sería «aprovechar al máximo el régimen fiscal foral» para que los navarros estén «en las mejores condiciones posibles», y que las empresas e inversores encuentren «las mejores oportunidades».
Aunque no entró en detalles, sí avanzó que «puede ser oportuno que apliquemos unos tipos más bajos para las empresas en el Impuesto de Sociedades».
Como justificación de esta medida, argumentó que «nuestra autonomía fiscal debe ser siempre utilizada para beneficiar a nuestros ciudadanos, no para perjudicarles y hacerles huir. Debe ser utilizada para mantener empresas, no para cerrarlas; para atraer inversiones, no para ahuyentarlas. Debe ser utilizada con responsabilidad y no con demagogia. En el marco de nuestro convenio económico, pero mirando hacia los ciudadanos y a las empresas», dijo.
Respecto a la posibilidad de pactar esta reforma con el PSN, la presidenta reiteró el compromiso de su Ejecutivo con las medidas recogidas en el Plan de Empleo y confió en que los socialistas no lleguen a acuerdos fiscales con Bildu.
En ese sentido, censuró especialmente el «acercamiento» del PSN a Bildu para recuperar el Impuesto de Patrimonio, medida que salió adelante en diciembre de 2012 y que rebaja de los 700.000 a los 300.000 euros el límite de los bienes a gravar de los ciudadanos. A juicio de la jefa del Ejecutivo, la recuperación de este gravamen ha perjudicado «a las clases medias» y no ha logrado la recaudación prevista.
Por ello estimó que «no es bueno ese acercamiento del PSN a algunas propuestas de Bildu, que no las aprueban ni en Gipuzkoa», dijo, sin mencionar que este territorio aprobó en diciembre el Impuesto sobre la Riqueza y las Grandes Fortunas.
En cualquier caso, confió en llegar a acuerdos con el PSN, «cediendo unos o cediendo otros», porque estos pactos «colocan a Navarra en las mejores condiciones, fiscales especialmente, para la clase media, para los trabajadores, para los ciudadanos, y también para que haya más emprendimiento en Navarra, que vengan más empresas a nuestra comunidad».
Al ser preguntada sobre los Presupuestos para 2014, la presidenta señaló que intentarán llegar a acuerdos en el seno del Parlamento, «siendo conscientes de que en estos momentos lo óptimo para cualquier gobierno es tener Presupuestos».
Barcina matizó sin embargo que, una prórroga presupuestaria «no es lo más grave que puede suceder para tener incentivos económicos, porque te sigue dejando un margen de actuación», sobre todo en una situación en la que, según reconoció, «los ingresos van a la baja año tras año» y podría prolongarse a lo largo de 2014.
La presidenta puso el ejemplo de la Mesa de Empleo y aseguró que se ha podido poner en práctica la mayoría de las medidas porque este año «había un presupuesto prorrogado con un presupuesto inicial superior al de este año».
«Como los ingresos de 2012 han sido superiores a los de 2013 y los de 2014 no se prevé que sean mayores a los que estarían prorrogados, se dificulta administrativamente la ejecución, pero no es tan negativo como tener un presupuesto prorrogado cuando los ingresos van al alza», porque en ese caso no se pueden «emprender nuevas actuaciones».
Además, afirmó, «siempre se puede llegar a acuerdos puntuales o a aprobaciones específicas en el Parlamento».
«Trabajaremos para que Navarra tenga unos Presupuestos, pero ni somos ni seremos la única comunidad en estos momentos en España que tiene Presupuestos prorrogados», manifestó.
El plan de empleo, «una farsa»
Entretanto, los portavoces de los grupos parlamentarios que conforman EH Bildu (Maiorga Ramírez y Bakartxo Ruiz, de Bildu, y Patxi Zabaleta, de Aralar) afirmaron ayer que ha quedado constatado que el Plan de Empleo que fue aprobado por UPN, PSN y PP era «una auténtica farsa».
Los representantes de EH Bildu respondían de esta manera a la presidenta del Gobierno, Yolanda Barcina, quien afirmó que, dada la coincidencia de gran parte de las medidas del Plan de Empleo con las del Plan de Acción contra la crisis del Gobierno de Nafarroa, 41 de las 60 medidas ya están en marcha este año, con partida presupuestaria.
De esta forma, afirmaron que se constata que el Plan de Empleo «era una auténtica farsa en la medida en que no tenía iniciativas encaminadas a hacer frente a la destrucción de empleo que ha generado el Gobierno de Navarra».
Los portavoces de EH Bildu denunciaron además que el Gobierno de UPN, «lejos de impulsar la reactivación económica, se convierte en un agente destructor de empleo», como lo demuestra «su política de recortes y despidos en empresas públicas, su inacción en casos sangrantes como Inasa», por lo que los parlamentarios de la coalición anunciaron que van a trabajar para «impedir recortes y asegurar la calidad del empleo, y el mantenimiento del empleo público».
Barcina avanzó que en los próximos meses su Ejecutivo va a trabajar en el diseño de una reforma fiscal «integral», cuyo objetivo sería «aprovechar al máximo el régimen fiscal foral».
La parlamentaria de EH Bildu Belén Arrondo advirtió ayer de que la reforma fiscal que están tratando de acordar el PNV y el PSE no parece apuntar hacia «un reparto más justo de la riqueza», y lamentó que «ni uno ni otro tienen intención de seguir el camino abierto por la Diputación de Gipuzkoa».
Arrondo, en una rueda de prensa en el Parlamento, afirmó que no parece existir «interés alguno» en tratar de incorporar a EH Bildu al pacto sobre el que trabajan jelkides y socialistas. Recordó que ya trasladaron su propuesta fiscal al PNV antes del verano, pero desde entonces no se han vuelto a poner en contacto con ellos.
La representante de la coalición abertzale lamentó que el acuerdo se esté preparando «entre cuatro paredes» y «alejado» de la opinión pública, aunque afirmó que tiene la «intuición» de que no habrá cambios significativos respecto a la tributación de las grandes fortunas o las exenciones en el Impuesto de Sociedades.
«No parece que haya un gran interés de que los rendimientos de capital paguen más», lamentó, al tiempo que expresaba su temor a que la reforma tributaria no sea sino «más de lo mismo», de forma que el peso de la carga fiscal seguirá recayendo sobre «las espaldas de los trabajadores».
En esta línea, denunció que las modificaciones impositivas que podrían consensuar ambos partidos no tienen visos de avanzar hacia «un reparto más justo de la riqueza y que quienes más tienen más paguen».
El pasado lunes, el portavoz del Gobierno de Gasteiz, Josu Erkoreka, no quiso entrar en detalles y avanzó de forma genérica que habrá «una revisión del sistema fiscal y se retocarán varias figuras impositivas», ya que «a lo que se tiende es a un incremento de la presión fiscal».
Por lo que respecta a la posibilidad de que otras formaciones se sumen al pacto, el consejero dijo que «antes o después será necesario poner en común el acuerdo con el resto de partidos. «La incorporación de nuevas formaciones al pacto será imprescindible para que puedan aprobarse las normas en los tres territorios», reconoció. GARA
El portavoz de EH Bildu en las Juntas de Araba, Gorka Ortiz de Guinea, acusó ayer al Gobierno foral del PP de plantear «medidas populistas e improvisadas» en materia fiscal.
Ortiz de Guinea, a través de un comunicado, criticó las modificaciones tributarias presentadas este pasado martes por el diputado general de Araba, Javier de Andrés (PP) -que por el momento no cuenta con los votos suficientes para aprobarlas en las Juntas Generales-, en las que se incluyen deducciones para desempleados y familias numerosas.
El representante de la coalición abertzale denunció que el Gobierno foral «ha decidido renunciar» a gravar más a las rentas altas. Además, censuró que se pretenda «regalar 250 euros a cada familia numerosa, sin tener en cuenta si ingresa 3.000, 30.000 ó 300.000 euros anuales».
Además, Bildu lamenta que el PP no incluya en su plan una medida para incrementar la presión fiscal a las rentas más altas, especialmente a las «cerca de 350 personas físicas censadas en la Hacienda alavesa que cuentan entre todos con un patrimonio cercano a los 1.800 millones de euros».
Bildu considera que esta propuesta se parece más a «un anuncio publicitario» que a un verdadero cambio normativo, y apuesta por una reforma en profundidad del Impuesto de Sociedades que el PP «ni siquiera menciona».
También mostró sus críticas a esta propuesta la portavoz del Grupo Juntero de Ezker Batua-Berdeak en Araba, Nerea Gálvez, quien acusó al diputado general de hacer «una mera política seguidista de Madrid sin perfil propio para Alava y olvidando el dato más importante de todos, que es que Alava está a la cabeza del incremento de paro».
Por otra parte, Gálvez cree que el plan presentado por el responsable del PP «es una llamada de atención a PNV y PSOE, porque se queda fuera de negociaciones en el Parlamento vasco y las medidas que se tomen no se harán contando con sus propuestas».
Finalmente, Gálvez acusó a De Andrés de «falta de cortesía parlamentaria», al presentar las medidas «en rueda de prensa y no en la sede las Juntas Generales». GARA