Tras el partido las redes sociales recogían criticas muy duras hacia los jugadores blanquiazules, como si empatar en el Ciutat de Valencia, lo que la Real no había conseguido en sus últimas cinco visitas en Primera, fuera un drama. El equipo de Arrasate lleva seis partidos oficiales con tres victorias por 2-0, dos empates fuera de casa y una única derrota en Anoeta ante un Atlético de Madrid que en estos momentos es el equipo más en forma de la Liga y sufrió en los últimos minutos para ganar.

Algunos se han acostumbrado al sabor dulce de la victoria, pero no es fácil vencer en ningún partido en Primera y lo más importante es no perder cuando no se puede ganar. Partidos como el de ayer los ha perdido la Real en anteriores temporadas, y no solo en el Ciutat de Valencia. La pasada temporada ante el Getafe y el Atlético de Madrid en Anoeta y contra el Levante en Valencia la Real sumó un punto y acabó cuarta. Ésta ha sumado cuatro. Hay equipos que se le dan mal a la Real y no es un secreto para nadie que Levante y Atlético de Madrid son los mejores exponentes de ese fútbol. Los jugadores son los primeros que quieren ganar partidos y clasificarse para la Champions, pero hay que tener claro que es difícil repetirlo y más en una temporada en la que se compagina la Liga con la máxima competición continental. Que fácil se acostumbra la gente a lo bueno cuando eso no es lo normal.