Patxi López: «Me da igual si las armas se pudren u oxidan en los zulos, pero que ETA desaparezca ya»
GARA | IRUÑEA
En un momento en que múltiples portavoces políticos cruzan opiniones y elucubraciones sobre eventuales avances de ETA hacia el desarme, el líder del PSOE, Patxi López, restó importancia al tema. Aseguró en una entrevista a la Cadena Ser que le da igual si las armas «se entregan en un sitio o se pudren u oxidan en los zulos», ya que lo importante es que ETA «desaparezca ya».
En su opinión, «lo que no tiene razón de ser es una banda terrorista que dice que no va a actuar», por lo que entiende que hay que centrar el discurso en exigirle que «se disuelva definitivamente». A partir de ahí, aseguró que sería hora de dejar a la política «que evolucione y que resuelva los problemas».
En la entrevista, López fue preguntado también sobre el abandono de la Ponencia del Parlamento de Gasteiz por parte del PSE. Dijo ante todo que «es una tontería como un piano» afirmar que la decisión ha sido impuesta por él porque la foto con EH Bildu le perjudicaría en su carrera para liderar el PSE.
Por contra, insistió en la tesis de que lo hacen porque EH Bildu tiene un recorrido pendiente. En esta línea, aludió a una entrevista publicada ayer a su portavoz, Laura Mintegi, en la que esta incidía en que «los políticos deben crear las condiciones para que ETA no tenga razón de ser». López le repreguntó: «¿Quiere decir que ETA tiene razón de ser? ¿Quiere decir que ETA ha tenido razón de ser? Si ellos pretenden que los socialistas asumamos, en algún momento, que ETA ha tenido razón de ser, se equivocan radicalmente».
Fiscalía: «No consolidada»
Mientras tanto, la Fiscalía española afirma en su memoria, difundida ayer, que cree que ETA está inmersa en un proceso de debate interno que «previsiblemente estaría en su recta final», aunque advierte de que la situación actual «no está suficientemente consolidada» y que por lo tanto puede «retornar a anteriores posiciones».
El capítulo dedicado a la organización vasca en esta memoria indica que la decisión de octubre de 2011 de dejar la lucha armada definitivamente ha reducido la amenaza, pero no puede afirmarse que este riesgo haya desaparecido al mantener ETA su estructura operativa y por tanto «la posibilidad de cometer atentados».