Al equipo le sostiene su novedosa alta efectividad cara al gol
«No hemos estado a la altura», reconoce De Marcos
Los rojiblancos asumen que les faltó la intensidad del Espanyol y miran al Betis.
Joseba VIVANCO
Mientras los leones rojiblancos dicen mirar ya al partido de este jueves ante el Betis, como la aciaga noche del lunes apuntaba Iraizoz y ayer hacía lo propio San José, la parroquia rojiblanca aun observa de reojo el garabato de equipo ante el Espanyol. Pocos peros o ninguno a la derrota, por mucho que Ernesto Valverde quisiera edulcorarla en su comparecencia posterior, y lo malo que estaban sobre aviso. El propio técnico había hecho incapié en ese «espíritu» -lo llamó- aguerrido de los de Javier Agirre. Pero ni por esas.
«No hemos escarmentado del inicio del primer tiempo. A pesar de ello, hemos llegado con empate al descanso, sabíamos que iban a salir fuerte en la segunda parte, pero no hemos estado a la altura y nos han pasado por encima», asumía sin tapujos uno de los goleadores de la noche, De Marcos. «Han estado más agresivos que nosotros, la mayoría de los rechaces eran para ellos y así se ganan los partidos también», añadía el alavés, que calificaba la derrota como «un tortazo».
El equipo se ejercitó ayer de regreso a Lezama y tras la sesión, uno de los más señalados, el central Mikel San José, salió a sala de prensa. Muy cuestionada su actuación en las crónicas del partido y redes sociales, el navarro asumió que «el Espanyol mantuvo la intensidad todo el partido y nosotros no». Y hay que insistir, y eso que estaban avisados por su entrenador.
¿Si le falta oficio a este equipo como les echó en cara por segunda vez desde su llegada Ernesto Valverde?, le preguntaron. «Todos los equipos y todos los jugadores cometemos errores y el Espanyol aprovechó sus ocasiones mejor», se limitó a contestar el de Atarrabia, que como sus compañeros, admitió que ante el Betis «puedo salir yo o cualquiera». ¿Falta contundencia atrás?, le volvieron a cuestionar. «Atacar y defender es cosa de todos. Hacemos goles y nos hacen también. La nota positiva es que hay que mirar a la clasificación», despejó con oficio.
Hacen goles y les hacen. Los de Ernesto Valverde están destacando por una cualidad desterrada en tiempos de Bielsa, la efectividad. Esta jornada, por ejemplo, fue el cuarto equipo más efectivo, con 9 remates, tres a portería y dos goles; eso sí, el Espanyol fue más eficaz, además del Barcelona y Osasuna. Es el cuarto equipo más goleador, tras los `tres grandes', pero el 14º más rematador.
La pega es que los está recibiendo también demasiado fácil. Ha encajado 9 tantos, cinco en los dos últimos choques, y eso cuando sus porteros han dejado de ser de largo los que más paradas hacen, estadística en la que Iraizoz la campaña pasada se destacó y de largo.
Iker Muniain es ahora mismo uno de los rojiblancos más en forma. Al menos, el que más ganas le echa, el que más lo intenta. Y en días como el lunes, en que quiere hacer cosas y multiplicar sus habituales conducciones de balón hacia dentro, los rivales decidieron frenarle en seco con la permisividad del trencilla de turno. Ocho faltas sufrió el jugador de la Txantrea, el más castigado de toda la jornada liguera, por delante por ejemplo de Neymar, el segundo, que recibió seis. Tras cinco partidos disputados, Iker es el cuarto futbolista que más faltas ha sufrido, con 17. Por delante de él, Neymar, con 23, el valencianista Banega y el merengue Isco.
Pero hay otro jugador que encabeza una de las clasificaciones de la Liga. Carlos Gurpegi, cuestionado muchas veces, hace un trabajo poco visible y lidera nada menos que la clasificación de recuperadores. Es el futbolista que más balones ha recuperado, 68, tras estas cinco primeras jornadas. El de Andosilla es, asimismo, el tercer jugador que más balones ha interceptado, 14, por detrás solo de Godín, 16, y Rakitic, 15, pero el navarro en menos minutos jugados que el colchonero y el sevillista. J.V.
