Cuando las canciones eran himnos prohibidos
«Vivir es fácil con los ojos cerrados»
Mikel INSAUSTI
De paso resalta la importancia en la comprensión de los textos que acompañan a la música, algo que en la época del franquismo estaba al alcance de muy pocos, como el profesor de inglés que protagoniza esta película de carretera. Javier Cámara encarna generosamente al buen hombre que quería difundir las traducciones de las canciones de los Beatles, en un tiempo en el que el aislamiento y atraso culturales dificultaban cualquier acceso a las nuevas tendencias que surgían y se desarrollaban en el exterior.
David Trueba demuestra conocer muy bien la mentalidad de los años 60, y el significado de rebeldía generacional que entonces podía tener un simple corte de pelo. Lo que le falla a la hora de contarlo para el público actual es el factor nostálgico, por cuanto conlleva de idealizador de una realidad histórica que corre el peligro de caer en la batallita del abuelo.
En «Vivir es fácil con los ojos cerrados» le puede el cariño desmedido que siente por sus personajes, haciéndolos demasiado tiernos para tratarse de tres seres solitarios obligados a endurecerse en su viaje a través de un régimen totalitario al que había que sobrevivir, aunque fuera cantando a voz en grito «Help!».
Dirección y guión:
David Trueba.
Intérpretes:
Javier Cámara, Natalia de Molina, Francesc Colomer, Ramón Fontserè.
Fotografía: Daniel Vilar.
País: Estado español. 2013.
Duración: 108 minutos.