TRAS EL Pacto PNV-PSE
Bilbao alaba la bondad del pacto PNV-PSE porque sirve para «romper frentes»
El diputado general de Bizkaia defendió ayer en su declaración pública ante las Juntas Generales en Gernika el acuerdo rubricado por su partido con el PSE, al tiempo que renegó de experiencias como el Pacto de Lizarra-Garazi.
Agustín GOIKOETXEA-Ion SALGADO
El diputado general de Bizkaia cumplió con el guión escrito desde Sabin Etxea, saludando el acuerdo alcanzado por PNV y PSE, aunque el tono del discurso de José Luis Bilbao en Gernika no fue tan entusiasta cómo cuando se erigió en el ariete jeltzale contra el mismo partido al que ahora se abraza mientras Patxi López residía en Ajuria Enea. Lo que dejó bien claro es que da por «fracasadas» experiencias de acumulación de fuerzas como la que representó hace quince años el Pacto de Lizarra-Garazi
A pesar de no mostrarse efusivo en su intervención ante la Cámara vizcaina, Bilbao siempre ha abogado por un acuerdo de fondo con el PSE, por lo que ayer defendió este pacto afirmando que «es lo que nos pide la sociedad». «Mi sincera opinión es que este es el acuerdo que necesita nuestro país», dijo tras indicar que «es objetivamente bueno y necesario, y que tanto este diputado general como la Diputación de Bizkaia lo comparte, lo apoya y lo celebra».
«Un acuerdo entre diferentes, que rompe las políticas de bloques y de trincheras, con contenidos y compromisos claros, cuyo objetivo es el empleo, la recuperación económica, la cohesión social, el mantenimiento del estado del bienestar y los servicios públicos, y la estabilidad institucional», enumeró.
El dirigente jeltzale empleó términos como «transversalidad» para resaltar el valor del acuerdo con el PSE. «Es bueno romper frentes, es bueno llegar a acuerdos entre diferentes». Y, como se hiciera la semana pasada en Gasteiz, incidió en la disposición a que otras fuerzas se sumen: «Estamos dispuestos a ello y, en lo concreto, las diferencias en materia fiscal no son insalvables. Cosa diferente es el vértigo que a alguno le pueda dar salir en esta foto».
Lo cierto es que la arenga siguiente contra la política económica del Gobierno Rajoy y sus consecuencias dejaba bien claro que no espera acercamiento alguno con sus últimos aliados en el ámbito presupuestario. Más tarde, la portavoz del PP, Esther Martínez, consideró que a PNV y PSE les urgía llegar a un acuerdo por sus propias necesidades.
Llegó a decir que ese pacto es «un torpedo en la línea de flotación de nuestro autogobierno», que puede enterrar la foralidad. Martínez reclamó «un diputado general y no un peón del PNV», alabando acuerdos anteriores entre los jeltzales y el PP hechos «pensando en los vizcainos, sin que se den injerencias ni interferencias desde el Parlamento (autonómico)».
«Necesitamos un diputado general que deje de agachar la cabeza ante los mandatos de Ajuria Enea y levante la voz para defender a Bizkaia», insistió.
El discurso de Esther Martínez en Gernika siguió la línea del ofrecido poco antes en Gasteiz por el diputado general de Araba en el pleno de Política General que también tuvo lugar ayer en las Juntas Generales. Javier de Andrés advirtió de que no aceptará injerencias del Parlamento en materia fiscal, al estimar que así se cuestiona el Concierto Económico.
«La Diputación defenderá la foralidad porque es lo que distingue nuestra autonomía. Es una singularidad muy anterior a la existencia de la Administración española», a lo que el dirigente del PP añadió que su cuestionamiento supondría hacer tambalear los principios de la propia autonomía.
«Álava tiene su propia identidad y capacidad. Porque Álava no es igual que Bizkaia y Gipuzkoa. Porque tenemos nuestra propia identidad. No estoy por la homogeneización», manifestó De Andrés, acusando al pacto PNV-PSE de «ignorar» inversiones estratégicas para ese herrialde.
Advertencia del PSE
En Gernika, el portavoz del PSE, Iñaki Egaña, advirtió a José Luis Bilbao de que estarán vigilantes para que el PNV cumpla lo acordado, también en la Diputación vizcaina, y saludó que finalmente se hubiera pronunciado sobre el pacto. No se anduvo por las ramas Egaña al desnudar las premuras jeltzales por lograr el acercamiento. «Han bastado nueve meses de cambio de inquilino en Ajuria Enea para dejar claro que, tras la bronca, tras las palabras y los acentos gruesos contra el lehendakari López y su Gobierno, no había alternativa real», declaró.
Las críticas hacia Bilbao no aminoraron, al acusarle de «haber estado más preocupado en ser la oposición política al Gobierno de Patxi López que en gestionar los intereses de los ciudadanos de Bizkaia». Esa dinámica habría sido la que ha obligado al PNV «a dejarse llevar por la inercia, a una política de gestos y de titulares de prensa».
Los reproches a la «inacción» del Ejecutivo foral también llegaron desde EH Bildu, que considera que esa actitud no ha protegido a la ciudadanía frente a la grave situación social. Tras escuchar a José Luis Bilbao, su portavoz comentó que «no conoce la realidad» del herrialde.
«Cuando usted dice que la situación empieza a mejorar, se está riendo de la gente», enfatizó Irune Soto, antes de pedirle que «no dibuje escenarios idílicos irreales». La apoderada soberanista acusó al PNV de «no poner ningún obstáculo a las medidas de empobrecimiento y precarización que llegan desde Madrid», y de haber aprovechado la coyuntura «para aplicar recortes».
«Mientras rescatan al Bilbao Basket, recortan a quienes están en riesgo de exclusión social; mientras negocian con sus socios del PP y del PSE, hay gente que pasa hambre», apostilló.
El grupo de EH Bildu en las Juntas Generales de Araba podría apoyar algunas de las iniciativas recogidas en la reforma fiscal propuesta por PNV y PSE. Según explicó ayer su portavoz en la Cámara foral, Gorka Ortiz de Guinea, que guarda prudencia a la espera de analizar a fondo el acuerdo, la coalición soberanista estaría dispuesta a votar a favor de ciertas medidas, como son la modificación de las rentas irregulares del trabajo o la revisión de las las aportaciones a las Entidades de Previsión Social Voluntaria (EPSV) para que estas se deduzcan por un máximo de 12.000 euros, sin tener en cuenta la edad. Dos medidas que, tal como Ortiz de Guinea recordó, fueron rechazadas por PP y PNV cuando EH Bildu las defendió en las JJGG. «Llevamos dos años presentándolas aquí. Son medidas con las que no vamos a tener ningún tipo de problema porque son nuestras, pero en otras discrepamos profundamente y tenemos que hacer un profundo análisis», precisó.
La decisión de EH Bildu agrieta un poco más la débil posición del PP en la Diputación. Por eso, por la tarde, el diputado general, Javier de Andrés, hizo un guiño a la posibilidad de llegar a acuerdos con PNV y PSE, y evitar que se apruebe una reforma fiscal sin su voto.
Por su parte, el diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, el mismo que hace dos años tildó de «ocurrencia» la política económica del Gobierno de Patxi López, que también incluía una reforma fiscal, y denunció las medidas que se estaban adoptando en Gipuzkoa con afirmaciones del tipo de que «la vaca no da más leche», llevó ayer a las JJGG el paquete de reformas fiscales del pacto PNV-PSE, que incluye algunas de las más criticadas por él.
La central sindical advierte de que las rentas altas y de capital no van a pagar más con la reforma del IRPF y considera que algunos de los cambios son «inapreciables». Respecto al Impuesto de Sociedades, considera que se queda más corto que el de la Diputación de Gipuzkoa.
Uno de los principales problemas de las haciendas públicas se encuentra en el fraude fiscal, que en la CAV supera el 20%, pero ELA asegura que en el acuerdo «no hay medidas concretas para aumentar la inspección y, por lo tanto, no es una prioridad de los firmantes».
