Pau da el visto bueno a la euroorden contra Aranalde y rechaza la de Zubillaga
El Tribunal de Pau aceptó ayer la euroorden contra Jokin Aranalde que recurrirá el fallo. Por contra, rechazó extraditar a Aitor Zubillaga por «defectos de forma». Bake Bidea interpela a la justicia francesa para que, «en este contexto», renuncie a acceder a la petición de Madrid.
Arantxa MANTEROLA | BAIONA
Tras varias sesiones en las que ha examinado las peticiones de euroorden de la Audiencia Nacional contra Jokin Aranalde y Aitor Zubillaga, la Corte de Instrucción de Pau dió a conocer ayer su fallo. Así, mientras rechazaba por «defectos de forma» la extradición de Zubillaga, aceptó acceder a la de Aranalde.
En el caso del primero, el Tribunal ha considerado que Madrid no ha tramitado la euroorden como exige la normativa ya que únicamente ha enviado una traducción al francés de la demanda que databa de 2008.
Sin embargo, el juez se ha alineado a la postura del fiscal que, dando por buenos los argumentos de la AN, se mostró a favor de aceptar la euroorden en la vista definitiva que tuvo lugar el pasado 10 de setiembre.
En ella participó Patrick Baudouin, conocido abogado y presidente de honor de la Federación Internacional de Derechos Humanos que, alegando a que «es sabido que en España se practica la tortura», requirió al Tribunal que no aceptara la entrega del ibartarra.
La abogada defensora del exiliado ha anunciado su intención de recurrir la decisión ante la Corte de Casación (Supremo) para lo que cuenta con tres días.
«Obstáculo para el proceso»
Bake Bidea ha deplorado la decisión que, estima, «representa un obstáculo para el proceso de paz». Recuerda que, entre otros agentes, el Colectivo de Exiliados Políticos Vascos, del que Aranalde es portavoz, presentó en junio su hoja de ruta para impulsar dicho proceso.
En ese sentido, ha interpelado a la justicia para que, «en el contexto actual sea consciente de su papel y del peso de sus decisiones» para la resolución del conflicto. Asimismo, ha anunciado iniciativas para denunciar la decisión judicial.
Bake Bidea ha reiterado que los procedimientos de euroorden son «dispositivos políticos» que no hacen más que «alimentar la confrontación» y «obstaculizar la solución».