El pleno de las Juntas Generales de Gipuzkoa incluía ayer en uno de sus puntos la solicitud de reprobación del diputado de Innovación, Desarrollo Rural y Turismo, Jon Peli Uriguen, cursada el pasado mes de julio por el PSE al considerar que su Departamento no había aprobado aún todas las inversiones pactadas con el PSE para desarrollar el Plan Anticrisis.

Sin embargo, poco antes de llegar a dicho punto, los junteros del PSE Julio Astudillo y Rafaela Romero comparecieron ante los medios para anunciar la retirada del orden del día de su petición, al comprobar que ya están distribuidos la totalidad de los 7,6 millones del plan.

El propio diputado foral compareció también ante los periodistas para señalar que la marcha atrás del PSE es «la constatación» de que desde julio el PSE sabe «cómo va» la ejecución del plan anticrisis. En concreto, aseguró que este partido ya sabía cuál era el destino de la última partida de 1,6 millones de euros que resta por cerrar el plan, una cantidad que se dedicará a la creación de empleo verde (medio ambiente) y blanco (servicios sociales).

Explicó que dicha partida se ha demorado ya que están trabajando con los agentes implicados y ello lleva unos «trámites de gestión». En este sentido, destacó que se está «dando voz» a agentes que hasta ahora no lo tenían en las Juntas y mostró su disposición a «seguir trabajando en este sentido».

Uriguen reprochó al PSE que su propuesta no es más que «una escenificación» que el partido de Patxi López, fuera de Gipuzkoa, había decidido llevar a cabo con el fin de justificar su «cambio de rumbo» tras el pacto con el PNV.

La portavoz del grupo juntero de EH Bildu, Idoia Ormazabal, incidió en este extremo señalando que el objetivo de la reprobación no era otro que «poner en cuestión el trabajo que está realizando la Diputación para hacer sitio así al pacto entre PNV y PSE».

Intervención de Arriola

Se da la circunstancia de que la solicitud fue anunciada por el secretario general del PSE de Gipuzkoa, Iñaki Arriola, que el pasado lunes participó en la reunión que su partido y PNV mantuvieron en Gasteiz con EH Bildu para informarle del pacto suscrito entre ambos y que deja en una posición comprometida al PSE de Gipuzkoa.

Ormazabal hizo mención a Arriola señalando que «en estos momentos al PSE le interesa sacarle del debate, ya que está imputado por prevaricación».

Julio Astudillo y Rafaela Romero, en su comparecencia de ayer, trataron de justificar su cambio de postura señalando que, gracias a su presión, se ha cumplido el plan. «Parece mentira que les demos un Plan Anticrisis, ideas en la ponencia y ahora hayamos tenido que presentar una reprobación para que lo cumplan», dijo Romero.

Ni PNV ni PP vieron con buenos ojos que el PSE retirara su reprobación. El portavoz del PNV, Markel Olano, expresó su «respeto» a la decisión, pero insistió en que el Gobierno foral de Bildu «merece la reprobación de las Juntas Generales en el ámbito económico, por su falta de gestión» y anunció que continuará adelante con otra serie de iniciativas.

El representante del PP en las Juntas, Juan Carlos Cano, calificó de «incomprensible paso atrás» la retirada de la propuesta del PSE.