El PNV solo ha conseguido que conste en las actas del Congreso y del Senado que el Gobierno de Mariano Rajoy no está dispuesto a hacer un esfuerzo económico extra para que las obras del TAV avancen más deprisa por el territorio de la CAV.

Como ya había sucedido la pasada semana en el Congreso, el PP rechazó ayer en el pleno del Senado, en el que cuenta con mayoría absoluta, una moción jeltzale en la que se reclamaba al Gobierno español que se comprometa a tener finalizadas todas las obras de plataforma de la «Y vasca» para el año 2016.

Desde el PP se reiteró que ese planteamiento no es realista y que el Ministerio de Fomento mantiene el apoyo a esta infraestructura pero dentro de las limitaciones presupuestarias que afronta. No obstante, también remarcó que este tramo no se encuentra paralizado, como ha sucedido con otras líneas de alta velocidad ferroviarias proyectadas en el Estado.

Pero la senadora María Eugenia Iparragirre replicó que si el Gobierno del PP «creyese en este proyecto» como dice, «pondría en marcha todos los mecanismos a su disposición» para acelerar las obras.

La propuesta del PNV también contó con la oposición de los senadores de Amaiur, aunque los argumentos utilizados por la coalición vasca nada tienen que ver con los del partido que gobierna en La Moncloa.

Como recogió la agencia Efe, Alberto Unamunzaga rechazó la construcción de esta obra y, además, puso en duda que tanto el PNV como el PSOE crean en ella cuando no la han incluido en el reciente pacto suscrito por ambos partidos en la CAV. «Ni la más mínima mención al tren de alta velocidad. Ustedes no lo consideran ni estratégico ni imprescindible y nos vienen con esta moción al Senado», comentó el representante de Amaiur.

«Al borde de la paralización»

Y es que el PSOE había hecho una encendida defensa de la iniciativa del PNV, a la que había añadido una enmienda en la que se contemplaba que el Ejecutivo de Lakua se encargue por encomienda en concreto de las obras de infraestructura pendientes en el nudo Bergara-Elorrio, en el tramo Gasteiz-Bilbao y en la estación de Ezkio-Itxaso.

Tontxu Rodríguez incidió en el «carácter estratégico» de esta obra de enlace con Europa, que «está languideciendo» debido a la actitud del Gobierno de Rajoy. «Está al borde de la paralización y será un ejemplo más del desbarajuste que rodea las grandes obras en España en los dos últimos años», vaticinó el exalcalde de Barakaldo.