Optimismo a pesar de la última derrota
Convencidos del camino emprendido
Oriol Riera declaró que «el equipo salió reforzado del Calderón» y quiere afrontar el partido ante el Levante como si fuera una final.
GARA | IRUÑEA
A pesar de salir derrotados del Vicente Calderón, la plantilla rojilla muestra, al menos públicamente, una gran confianza en las posibilidades del equipo tras la mejoría experimentada en los últimos partidos ligueros. La victoria ante el Elche fue una especie de punto de inflexión y ayer fue uno de los recién llegados, el delantero Oriol Riera, el que exhibió su total convencimiento de que el camino adquirido es el adecuado.
En este sentido, aunque de manera implícita, el delantero catalán parece dar por bueno el cambio que se dio en el banquillo. «Nos falta mucho para coger todas las ideas de Javi Gracia. Nos falta mejorar muchísimo. Pero, a parte de saber que nos faltan cosas, también sabemos que el camino es otro y que en él se ven otras cosas, un cambio de imagen», señaló.
En este sentido, considera clave haber conseguido la primera victoria ante el Elche, tres puntos que reforzaron mucho una moral que estaba tocada. «Sabíamos que, con una victoria, cambiarían mucho las cosas, lo sabíamos por la confianza que tiene la afición en nosotros. Después de perder partidos, hasta tú mismo empiezas a pensar en cosas en las que no deberías. Cambió la opinión pública tras la victoria y el Calderón, sabemos que este es el camino que debemos seguir: el del trabajo, el sacrificio y mejorar cada día. Al final, llegaremos a buen puerto», afirmó rotundo.
Con ganas de finales
Así, a pesar de estar todavía dentro del primer cuarto de competición, Oriol Riera mostró su disposición a afrontar partidos como el de ante el Levante como si de una final se tratara, no por el número de jornadas disputadas, sino por el nivel de autoexigencia que deben imponerse. «Está claro que, cuando sacas una buena imagen, pero pierdes, hay que refrendarlo en el próximo partido. Para nosotros vuelve a ser una final, como dijimos el día de Elche. Estamos acostumbrados a ello y vamos a ir por todas».
Entre otros factores, Osasuna está volviendo a sacar partido de las jugadas a balón, una fórmula vital para equipos a los que les cuesta crear fútbol, pero que puede convertirse en una gran fuente de puntos en partidos trabados. «El equipo tiene muchas esperanzas puestas en las jugadas ensayadas. Las estamos trabajando tanto ofensiva como defensivamente y creo que en ataque podemos aportar mucho. En casa, contra el Elche, tuvimos dos córners que casi marcamos y el otro día ante el Atlético también estuvimos a punto, aunque no acabaron de salir bien. Estuvimos ahí y tengo muchas esperanzas puestas en esa faceta», declaró Riera.
De una manera no demasiado ortodoxa, pero así llegó su gol en el Calderón, su segundo tanto oficial con el equipo rojillo. «Meter dos goles es bueno para mí, pero el más importante fue el primero por la victoria. Hay que ir sumando para la confianza de los delanteros y del equipo», señaló el de Vic, quien reconoció que la estrategia funcionó de una manera un poco peculiar. «Tal y como la puso Patxi -Puñal-, creo que era más fácil darle que no. Es una buena definición y un buen centro desde falta directa. La jugada era ensayada, aunque tenía que ser un poco diferente. Pero, al final, salió bien», afirmó entre risas.
De cara al domingo, espera a un «Levante que es un rival muy agresivo, defensivamente fuerte y con jugadores muy rápidos arriba. Nos enfrentamos a un equipo difícil, muy bregador. Va a tocar luchar como siempre», explicó Oriol Riera.
A pesar de no tener todavía el pertinente alta médica, la presencia de Álvaro Cejudo -padecía molestias en su rodilla derecha- y de Miguel De las Cuevas -sufrió una micorrotura en el cuádriceps derecho- fue la principal novedad del segundo entrenamiento realizado por la plantilla osasunista a la vuelta de su enfrentamiento al Atlético de Madrid el pasado martes. Ambos realizaron el mismo trabajo que el resto de sus compañeros, por lo que todo indica que el domingo podrían estar a la disposición de Javi Gracia para recibir al Levante. Etxaide, Miguel Flaño, Roberto Torres y Nino, por su parte, siguen con sus respectivos procesos de recuperación.
A la vista de lo que se ha podido ir viendo en estas dos sesiones, todo indica que Javi Gracia aparcará el trivote que empleó en el Calderón para recibir al Levante de Joaquín Caparrós. Jugando en casa, lo normal es que el técnico de la Txantrea apueste por un futbolista más ofensivo y el elegido podría ser el paraguayo Ariel Núñez, con Patxi Puñal y el Gato Silva como pivotes. GARA
Oriol Riera reconoció que «nos falta mucho para coger todas las ideas de Javi Gracia, pero además de saber lo que nos falta también sabemos que el camino es otro y que en él se ven otras cosas, un cambio de imagen».
El extremeño Jesús Gil Manzano, el colegiado más joven en debutar en Primera División, y que el martes dirigió el partido entre el Barcelona y la Real, será el encargado de dirigir el Málaga-Osasuna, de la octava jornada, según la decisión del Comité Técnico de Árbitros.
El delantero destacó que «el equipo tiene muchas esperanzas puestas en las jugadas ensayadas. Las estamos trabajando tanto ofensiva como defensivamente y creo que en ataque podemos aportar mucho».
El central David Navarro se reincorporó ayer a los entrenamientos del Levante tras superar los problemas estomacales que arrastraba en una sesión en la que no participó Ángel Rodríguez por problemas en la espalda. Navarro ya jugó con molestias el martes ante el Valladolid.