La responsable de la diplomacia europea, Catherine Ashton, pidió ayer «un proceso global de transición» para salir de la crisis provocada en Egipto por el golpe de Estado que derrocó al presidente Mohamed Morsi. «Eso quiere decir intentar incluir a todo el mundo», incluido Morsi y los Hermanos Musulmanes, explicó. En su tercera visita a Egipto desde el golpe, Ashton se reunió con las autoridades del país, entre ellas, el jefe del Ejército, Abdel Fattah al-Sissi. Por otra parte, un estudiante de secundaria, Abdula Mohamed Attia, partidario de Morsi de 17 años, murió de un disparo durante enfrentamientos a última hora del miércoles entre partidarios y detractores del derrocado presidente en la ciudad de Suez.