Planasa Navarra arranca la Liga LEB Oro esta noche a las 20.30 en el polideportivo Anaitasuna al recibir al Ford Burgos que el año pasado fue el campeón de categoría, aunque no pudo refrendar en los despachos su ascenso deportivo a la ACB. Todo un reto para un equipo remozado, en el que, aparte del técnico, repiten tres jugadores del año pasado: Christian Díaz, Joaquín Bonhome y Antón Savitski.

Savitski, nuevo capitán de Planasa Navarra, se mostraba ilusionado con el arranque del nuevo curso. «Por fin hemos entrenado bastante sanos. Así que se ha visto a la gente con muchas ganas y creo que estamos preparados. Aunque hasta que empiece la Liga no sabremos dónde estamos en la competición. Eso sí, veo que hay mimbres para pelear por todo», declaraba el alero iruindarra nacido en Sebastopol.

Y es que los entrenados por Ángel González Jareño han tenido una pretemporada complicada por las lesiones -David Mesa causará baja-, pero eso no impide que los jugadores se encuentren con muchísima ilusión para este nuevo reto. Y el propio entrenador reflejaba un inusual optimismo en su discurso. «Esta semana ha sido muy buena. Hemos podido recuperar a gente que estaba lesionada. Ha sido una semana de trabajo muy buena y me voy muy satisfecho», declaraba el preparador madrileño.

«Veo que la gente es muy trabajadora y está muy comprometida, con muy buena actitud. Con la falta de partidos que llevamos por la ausencia de efectivos, me ha gustado muchísimo la progresión que hemos llevado durante la semana. Por ahora, al equipo no se le puede pedir más», añadía.

Sin referencias

Sin embargo, el propio entrenador de la escuadra de Iruñea, debido a la escasez de preparación de su plantel, se confesaba incapaz de ofrecer mayores referencias para afrontar el estreno liguero ante un equipo que se ha armado, tanto en lo deportivo como en lo institucional, para no dejar escapar otra oportunidad de ascenso, si se presenta.

«Jugamos ante un Ford Burgos que es un gran equipo, pero no puedo decir qué clase de partido puede resultar. Lo único que puedo adelantar y que espero es que nos dejemos la piel en el Anaitasuna, y por el momento, si veo que el equipo lo ha dejado todo en la cancha, estaré conforme», se sinceraba Ángel González Jareño.

Lo cierto es que la escuadra castellana, al igual que la navarra, se ha tenido que reinventar, sobre todo al perder a Luke Sikma, que juega ahora en la Liga ACB, en las filas del CB Canarias. También han perdido jugadores de valor y experiencia en la LEB Oro como Dani López, ex del Manresa, Isaac López, otrora jugador de Gipuzkoa Basket, o Marcus Vinicius Toledo.

No obstante, el plantel que dirige Andreu Casadevall no tiene por qué perder el tiempo en lamentaciones. La llegada de jugadores como Taylor Coppenrath en el juego interior o Albert Sabat para ejercer de base, hacen a los burgaleses un rival de auténtico cuidado. Otros complementos como Jeff Xavier o los ex de Basket Navarra como Romá Bas y Jorge García ofrecen garantías para acometer la campaña.

«Ellos tienen mayor nivel físico, pero el nuestro es un muy buen grupo que sabe sobreponerse», advertía Jareño.