Vecinas y vecinos de Trapagaran se concentraron ayer tarde para denunciar la agresión sufrida por una mujer a quien su exmarido roció con líquido inflamable. Mientras, la víctima, según el parte médico ofrecido por el Hospital de Cruces, permanecía consciente y pendiente de que la próxima semana se proceda al autoinjerto de las quemaduras y la reducción de la fractura nasal. J.S.C., de 42 años, presenta quemaduras de segundo grado profundo en el 10% de la superficie corporal (manos, brazos, hombros, tercio superior del tórax y tercio superior de espalda), así como fractura nasal desplazada.

Antes de la concentración de la tarde, a la que animó a participar, la Junta de Portavoces del Ayuntamiento de Trapagaran expresó su «más rotundo rechazo y condena ante la brutal agresión». En un comunicado, el Consistorio mostró su solidaridad con la víctima y su familia.

También condenó este ataque machista Emakunde, que amina a la ciudadanía a reflejar su rechazo «más profundo» a este tipo de violencia que «es el símbolo más brutal de la desigualdad hombres y mujeres en esta sociedad».

Además de sumarse a las movilizaciones de denuncia en Trapagaran, Emakunde manifestó que solo desde la implicación de todos y el «necesario cambio de valores» se conseguirá acabar con el problema de la violencia hacia las mujeres.