Expertos suizos afirman que Arafat pudo haber sido envenenado con polonio-210
Una investigación de un grupo de científicos suizos admite la posibilidad de que el líder palestino Yaser Arafat, que murió en París en 2004, fuera envenenado con polonio-210 radiactivo, según un artículo publicado en el último número de la revista médica «The Lancet».
GARA | DAMASCO
Expertos suizos que analizaron los objetos personales de Yaser Arafat, fallecido en París en 2004, confirmaron la «posibilidad» de que el líder palestino fuera envenenado con una sustancia radiactiva, según un informe publicado por la revista médica británica «The Lancet».
«Varias muestras que contienes rastros de fluidos corporales (sangre y orina) contenían una radiactividad más alta e inexplicable con polonio-210 en comparación a muestras de referencia», escriben los expertos del Instituto de Radiofísica (IRA) de Lausana en el artículo publicado por la revista.
Los expertos suizos concentraron sus análisis en «manchas visibles de fluidos corporales en efectos personales específicos (ropa interior, cepillo de dientes, ropa deportiva)».
«Estos resultados sustentan la posibilidad de que Arafat haya sido envenenado con polonio-210», concluye el equipo.
En un informe filtrado por la cadena qatarí Al Jazeera en julio de 2012, este equipo de expertos aseguraba haber encontrado un nivel «significativo» de radioactividad en los enseres personales del líder palestino que murió el 11 de noviembre 2004, a los 75 años, en el hospital francés Percy de Clamart. Había sido hospitalizado a finales de octubre tras unos fuertes dolores abdominales. Su viuda no solicitó una autopsia, pero el resto de líderes palestinos siempre cuestionó las causas de la muerte apuntando hacia Israel. No obstante, en julio de 2012 presentó una denuncia ante un tribunal de la ciudad francesa de Nanterre por la posible muerte por envenenamiento de su esposo.
Desde que sus restos se exhumaron en noviembre de 2012, tres equipos de científicos están analizando el cuerpo, su ropa y muestras de tierra.
«Una autopsia habría sido útil en este caso, porque, aunque un envenenamiento por polonio podría no haber sido identificado en ese procedimiento, se habrían conservado muestras corporales sobre las que se podrían hacer pruebas más adelante», afirmaron los investigadores en el estudio.
El polonio-210 es una sustancia altamente radiactiva que fue utilizada para matar en 2006 en Londres al antiguo espía ruso convertido en opositor al Kremlin, Alexander Litvinenko. Este «asesinato radiológico», como lo denominaron los expertos, generó una crisis diplomática entre Rusia y Gran Bretaña.