La Renamo renuncia a más ataques pero pide que el Ejército se retire de su base
La que fuera guerrilla mozambiqueña y hoy principal partido de la oposición, Renamo, afirmó que no responderá al ataque del Ejército contra su base pero pidió que las tropas la evacuaran.
GARA | MAPUTO
El que fuera grupo rebelde mozambiqueño Renamo (Resistencia Nacional de Mozambique) prometió ayer no lanzar represalias después de que su base fuera atacada por el Ejército, pero pidió la retirada de las tropas gubernamentales. «La Renamo reafirma que no quiere una vuelta a la guerra», declaró Lourenço do Rosário, negociador que mantiene en contacto al poder y a los exrebeldes.
La Renamo «no va a responder al ataque de las tropas gubernamentales, pero pide que el jefe del Estado retire sus tropas de la zona, de forma que el líder de la oposición (líder de la Renamo) Afonso Dhlakama, pueda continuar dirigiendo sus fuerzas», añadió.
El pasado lunes el Ejército tomó la base militar de la Renamo, obligando a huir a Dhaklama. Este grupo reaccionó inmediatamente anulando el acuerdo de paz firmado en 1992, que puso fin a una guerra civil que comenzó en 1977 y que causó un millón de muertos.
Ayer, elementos aislados de la Renamo, actuando por iniciativa propia, atacaron un puesto de policía en el centro del país, sin causar víctimas, pero haciendo temer un aumento de los enfrentamientos. El portavoz de la Renamo, Fernando Mazanga, admitió que antiguos guerrilleros eran los autores del ataque, pero aseguró que actuaban sin órdenes del grupo, en una reacción espontánea de respuesta al ataque de su base por el Ejército. Al acabar el día, el negociador hizo saber que la Renamo exigía al Ejército que evacuara la base.
La Renamo, movimiento anticomunista que llevó a cabo una guerra contra el Frente de Liberación de Mozambique, (Frelimo) entre 1977 y 1992, se hizo particularmente conocido por su crueldad hacia los civiles, y hoy ha perdido los apoyos con los que contaba en la época de la guerra fría, sobre todo el de la Sudáfrica del appartheid.
Fue creado y respaldado por los servicios secretos de Rodesia (el actual Zimbabue) en respuesta al cobijo facilitado por Mozambique a las guerrillas que combatían contra el Gobierno de la minoría blanca en el país. La antigua guerrilla es ahora el primer partido de la oposición, y acusa al Frelimo de acaparar el poder y las riquezas naturales.
Sin medios para una guerra
Según Aditi Lalbahadur, investigador del Instituto Sudafricano de Asuntos Internacionales, la Renamo no cuenta ya con medios para resucitar el conflicto, mientras el Gobierno, que ha comenzado a explotar los enormes recursos de hidrocarburos recientemente descubiertos, no tiene ningún interés en suscitar la inseguridad. «Mozambique se esfuerza en atraer a investigadores extranjeros, y cualquier forma de inestabilidad jugaría en su contra», explica.
Pero después de años de paz la situación comenzó a deteriorarse el año pasado, cuando Dhlakama estableció su base en los montes Gorongosa y volvió a entrenar a guerrilleros. Desde abril las tensiones latentes se han transformado en enfrentamientos armados.
La responsable de la diplomacia de la UE, Catherine Ashton, expresó su preocupación por el asalto del ejército de Mozambique a la base de la Renamo y pidió un «diálogo constructivo» entre las partes implicadas.
A través de su embajador, EEUU pidió «contención a todas las partes y medidas visibles y eficaces» para calmar las tensiones y evitar riesgos de «escalada del conflicto».