Tiene apenas 23 años y parece como si llevara toda la vida en esto. Raúl García quiere ser un jugador importante en el Atlético y asegura que su recambio en Osasuna, tras su marcha hace tres temporadas, se llama Rúper.

Ha entrado en la convocatoria y estará hoy en Iruñea, ¿también sobre el césped?

Eso depende del míster, lo que sí estoy es preparado, porque he completado estupendamente, sin ningún problema, los entrenamientos durante la semana.

Curiosamente ha estado a punto de perdérselo por una lesión, circunstancia que no suele padecer muy habitualmente.

Esperemos que sea la dolencia más dura de mi carrera. Hasta ahora sólo había tenido una operación en la nariz, por la que me perdí dos partidos.

Casi siempre ha tenido algún contratiempo a punto de impedirle jugar contra Osasuna.

Ya el último partido que jugué como rojillo precisamente ante el Atlético la cosa estaba un poco revuelta y no tuve la ocasión de desperdirme como quería. Al año siguiente no vine por estar sancionado y esta va a ser la segunda ocasión en la que lo haga.

Su actual equipo le ha echado bastante en falta.

Quiero pensar que es una coincidencia, aunque sí que leí que, de los doce partidos que me he perdido en las tres temporadas que llevo en el Atlético, sólo se ganó el de la pasada jornada. Lo más importante es que el equipo gane, esté o no yo, pero espero aportar lo suficiente para que continúe cosechando triunfos.

Y eso que no siempre ha recibido precisamente halagos.

Tener contento a todo el mundo es muy complicado, estamos en un club donde los mediocentros siempre han estado en el punto de mira, lo hagas muy bien o regular. Intento mirar por el bien del equipo y los reproches que pueda haber hacia mi juego tampoco es que me preocupen demasiado.

Esta va a ser su tercera campaña como colchonero, ¿se siente cada vez más importante en el equipo?

A mí me gusta tener responsabilidad, sobre todo ahora que van pasando los años. Lógicamente tener un peso en el equipo es una de las cosas por las que trabajo.

Volviendo al choque de hoy, ¿puede éste determinar la trayectoria de ambas escuadras?

Es un poco pronto todavía para ello, aunque sí que para nosotros el margen de error ya lo hemos gastado, no podemos repetir muchos más fallos. Osasuna está ahora bastante más tranquilo que en épocas anteriores, pero tampoco creo que se vaya a relajar y saldrá a tope.

¿Qué aspecto va a ser clave para que el encuentro se decante por uno u otro equipo?

Quien se relaje un poco es el que perderá. Va a ser un partido muy disputado, con una presión local muy fuerte. Pero, si somos conscientes de ello y sabemos superarla, la calidad que tenemos se tendrá que notar, siempre y cuando estemos al 100% y vayamos a la batalla como ellos.

¿Cómo ve a Osasuna este año, tras dos campañas agónicas?

Lo mejor es que no me están haciendo sufrir tanto como otros años. Veo al equipo bastante bien, parece que van a tener un poco más de margen en cuanto a puntos y se les ve con más confianza en su juego. En defensa están muy seguros y es arriba donde parece que hay más problemas, como se vio en Getafe, pero lo importante es que están generando ocasiones.

Se especuló el pasado verano con la posibilidad de su regreso.

El año pasado jugué todo, fue una temporada redonda, estamos en Champions y no me planteaba cambiar de equipo. Ni siquiera mis representantes me dijeron nada, lo que no quiere decir que no hubiera algo o no. Como mi opción era la de no salir, tampoco ellos me lo comunicaron.

Desde que fue traspasado, Osasuna lleva mucho tiempo buscando un jugador de parecido perfil al suyo, de ida y vuelta.

Creo que ahora mismo hay un futbolista en la plantilla que puede hacer muy bien el papel que yo realizaba, como es Rúper. Se parece bastante a mí y, si goza de confianza, puede llegar a hacer cosas muy interesantes.

Sólo tiene 23 años y queda mucho para entonces, pero ¿se ve jugando sus últimas temporadas en Osasuna?

Siempre he comentado que me gustaría volver porque es mi casa y un club donde he vivido grandes experiencias. Si lo hago no será para arrastrarme, sino porque pueda aportar cosas. Cuando vayan pasando los años, veremos cómo estoy.