Trabajadores de la empresa Faurecia Orkoien, que llevan ya diez días en huelga para exigir la readmisión de los 11 despedidos -cinco de ellos están encerrados en la iglesia de San Lorenzo-, se concentrarón ayer frente a la sede de la Confederación de Empresarios de Navarra (CEN) .

Por su parte, los cinco trabajadores despedidos de Faurecia que está encerrados en San Lorenzo hicieron público un comunicado en el que, tras agradecer las «innumerables» muestras de apoyo recibidas, denuncian las «prácticas mafiosas de la dirección» de la empresa que, al «darse cuenta del seguimiento mayoritario de la huelga indefinida por parte de la plantilla, comienza a presionar y chantajear a la gente con llamadas telefónicas a trabajadores y sus familias para, mediante amenazas, intentar que se reincorporen al trabajo».

Los encerrados afirman que los despidos han sido realizados por la empresa «sin nigún criterio productivo» y acusan a la dirección de «querer demostrar que no hay trabajo para todos, cuando en junio se realizaron 575 horas extras y contrataron personal ETT para producir durante el verano, en turnos de lunes a domingo».