La PAC fortalece la producción intensiva y la agroindustria
La aplicación de la Política Agraria Común en Hego Euskal Herria, que ayer cumplió veinte años, ha supuesto, según EHNE, la «aceleración de la puesta en marcha de políticas competitivas globalizadoras y neoliberales» y la «grave crisis» del modelo de producción sostenible, con la consiguiente desaparición de las pequeñas explotaciones familiares.
BILBO
EHNEaseguró que el resultado de la incorporación del Estado Español a la Comunidad Económica Europea (CEE) y de la consiguiente aplicación de la Política Común Agraria (PAC) es que «en la actualidad, cada día que pasa se pierde una explotación agraria en el conjunto de Euskal Herria» debido a las dificultades de los agricultores para obtener rentabilidad de su actividad a causa del descenso de los precios en origen.Según opinó EHNE, el ingreso en la CEE, del que ayer se cumplieron veinte años, supuso «acelerar la aplicación de políticas competitivas globalizadoras y neoliberales» y la entrada en «una grave crisis del modelo de producción agraria basado en la sostenibilidad». Indicó que «las explotaciones familiares han padecido las políticas agrarias encaminadas a fortalecer exclusivamente la agroindustria y la producción intensiva, con la vista puesta siempre en la exportación». La aplicación de la PAC «está provocando dificultades para que los agricultores obtengan rentabilidad de su actividad» y, según EHNE, «como contraprestación reciben unos subsidios que son un mero parche, que no fomentan la agricultura sostenible y creadora de empleo, sino que les convierte en un instrumento para financiar la agroindustria». El sindicato agrario vasco está integrado en la coordinadora de organizaciones agrarias COAG, quien aseguró que en los últimos veinte años el número de ocupados en el sector agrario ha descendido un 50% en el Estado español y recordó que las sucesivas reformas no han conseguido evitar la caída de los precios en origen y «han forzado a muchos agricultores a vender por debajo de los costes de producción o a abandonar la actividad».
Récord de remolacha
GARA
GASTEIZ
La producción final de remolacha en Araba ha logrado un récord de 220.000 toneladas, con una riqueza «excepcional» de 16,89, según indicó el sindicato UAGA, aunque matizó que «se esperaba que podía haber sido mejor». Este resultado se ha producido a pesar de las heladas de finales de diciembre y enero, y «gracias a un verano suave, que provocó un desarrollo vegetativo del cultivo óptimo», explicó el sindicato agrario alavés. Asimismo la producción tipo se ha incrementado con respecto de la campaña anterior, alcanzando una cantidad récord en Araba, de 88 toneladas tipo por hectárea, cuando en 2005 fueron 76.
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