BILBO
Los Juzgados de Donostia y la sede de UGT en Altsasu sufrieron sendos ataques con cócteles molotov en la madrugada del martes al miércoles. En la capital gipuzcoana los hechos tuvieron minutos antes de las 00.30 en las instalaciones judiciales ubicadas en la Plaza Teresa de Calcuta, cuando desconocidos arrojaron contra la fachada cuatro cócteles molotov que provocaron un en- negrecimiento de la pared, según informaron ayer por la mañana fuentes del Departamento de Interior de Lakua.
En Altsasu también se utilizaron cócteles molotov que provocaron diversos daños materiales en los lavabos del edificio que alberga la sede de UGT.
El sindicato UGT condenó los hechos y expresó su «más absoluto rechazo» ante lo sucedido, como hicieron numerosas formaciones políticas navarras. En una nota de prensa, aseguró que «la intención de los terroristas era incendiar la sede del sindicato» y explicó que «no han logrado su objetivo al haber fallado el dispositivo del artefacto».
«Sabotear el proceso»
UGT consideró que estos ataques «evidencian el carácter fascista de sus autores, así como su voluntad de sabotear cualquier proceso que pueda llevar a la restauración de la paz y de la libertad, tal y como exige la inmensa mayoría de este pueblo».
Asimismo, aseguró que «con actos como éste los terroristas no van a conseguir cambiar ni un ápice los compromisos de UGT con la paz, la libertad, la democracia y los derechos de los trabajadores».Además, condenó «la campaña de extorsión y chantaje a las empresas, que está llevando a cabo la organización terrorista ETA, y que está dañando la economía».