GARA

GASTEIZ

Mientras en las mismas calles de Gasteiz la Ertzaintza cargaba y se confirmaba la prohibición de actos como el de hoy en Santurtzi, la portavoz del Gobierno de Lakua, Miren Azkarate, instaba al mediodía de ayer a «mantener la serenidad» y a «impulsar la desaparición de los obstáculos para conseguir la paz y la normalización».

En una declaración institucional convocada tras la muerte de Roberto Sáiz, Azkarate consideró inaplazable la modificación de la política penitenciaria y «el abandono de la violencia por parte de ETA».

Después de que Azkarate realizara estas declaraciones, el Departamento de Interior, dirigido por Javier Balza, decretó la prohibición de «todos los actos en homenaje a los miembros de ETA fallecidos». Antes ya había prohibido el de hoy en Santurtzi o el de anoche en Portugalete, entre otros.

Según se señalaba en la nota de Interior, «tras el comunicado hecho público por ETA llamando a movilizarse en protesta por la muerte de los miembros de la organización, se han dado instrucciones a todas las unidades declarando prohibidos todos los actos que se puedan celebrar en los próximos días». «Todos estos actos se consideran ilegales al estar vinculados a una organización terrorista», añade.

Antes, el departamento de Javier Balza había esgrimido otros argumentos. Así, el veto al acto de Santurtzi se justificaba indicando que en otros anteriores en la localidad «se han exhibido o proferido lemas amenazantes o de enaltecimiento de ETA».

«Nora zoaz PNV?»

Tras conocerse las prohibiciones decretadas por Interior, Askatasuna hizo pública una nota en la que, tras subrayar que se mantienen todas las convocatorias, el organismo antirrepresivo criticó duramente al PNV y al Gobierno de Lakua.

«Han prohibido todos los actos sin tener ninguna orden judicial, por su propia iniciativa y sólo por interés político. Los estados español y francés matan a los presos vascos en las cárceles y el PNV reprime los actos en su memoria y las muestras de reconocimiento por parte de la sociedad vasca».

Tras destacar la responsabilidad del PSOE en las muertes de Angulo y Sáiz, subrayó que «los otros partidos que impulsaron la dispersión también son responsables. Especialmente el PNV».