DONOSTIA
El alcalde de Donostia, Odón Elorza, anunció ayer que estudiará con la Mancomunidad de San Marcos y con la Diputación de Gipuzkoa los posibles emplazamientos para ubicar una incineradora en la ciudad, aunque precisó que mantiene su apuesta por otros sistemas de tratamiento de basuras.El primer edil manifestó en el vertedero de San Marcos que aceptará la decisión del pleno si se pronunciase a favor de ubicar una planta incineradora en la capital donostiarra, con lo que no tendría que «producirse ya ningún bloqueo ni retraso en la adopción de soluciones».
Advirtió asimismo de que la incineradora que se construya «tendrá que atender las exigencias legales en materia medioambiental y la distancia mínima establecida a núcleos de población». Insistió en que apuesta por «poner en marcha procesos para la construcción de una ambiciosa planta de compostaje y otra mecánico-biológica en el emplazamiento del triángulo frente a Belartza, así como acometer la instalación de garbigunes en distintos puntos de la Comarca».
Para «constatar la validez» de estas alternativas el alcalde planteó «una moratoria de estudio por cuatro años para la incineradora». Pidió también el cierre del vertedero de San Marcos dentro de este año y propiciar la constitución de un consorcio que gestione «la toma de decisiones».
«Vuelve de forma pacífica»
Sobre el anuncio realizado por el primer edil donostiarra, el diputado general de Gipuzkoa, Joxe Joan González de Txabarri, aseguró que Odón Elorza, ha «rectificado de forma relevante» su postura ante la construcción de una incineradora en la ciudad. El máximo responsable foral guipuzcoano consideró que con estas declaraciones Elorza «cierran» ahora la «crisis que él mismo generó hace un año cuando rompió unilateralmente los acuerdos de la mayoría de los grupos junteros y partidos políticos en Gipuzkoa».
«Ahora da la impresión de que ha leído con atención los documentos del PIGRUG (Plan Integral de Gestión de Residuos Urbanos de Gipuzkoa) y vuelve a las posiciones» recogidas en el mismo, añadió. Opinó que el alcalde ha hecho que se pierda un año en una cuestión «relevante y decisiva» ya que, según dijo, «no hay ninguna novedad en la propuesta» del primer edil donostiarra. «Elorza se marchó de la Mancomunidad de San Marcos con unas formas un tanto virulentas y parece que ahora vuelve de una forma más pacífica», agregó González de Txabarri.
El diputado general consideró que las «manifestaciones ciudadanas de las últimas semanas han colaborado de forma decisiva para que Elorza reflexione» y señaló que «la cuestión clave era la necesidad de contar en la fase final del proceso de gestión de los residuos sólidos urbanos con una incineradora que diese término» a un ciclo que apuesta por «el reciclaje, el compostaje y la reutilización de materiales, pero que al final de la cadena tiene que tener una planta de quema de basuras».
