La Policía española no hizo huelga ayer en Nafarroa. Aunque tampoco tuvo una jornada «normal», ya que desde primera hora de la mañana desplegó sus efectivos en distintas zonas de Iruñerria, mientras que la Guardia Civil también decidió enviar a numerosos agentes a varios polígonos industriales y localidades como las del valle de Baztan, Lesaka, Sakana o Lizarra. En Alde Zaharra, por ejemplo, agentes provistos de lanzapelotas y porraspatrullaban por diversas calles. El principal objetivo era impedir que se iniciara la movilización que estaba convocada para las 12.00 en la Plaza del Ayuntamiento.
Para este atosigante despliegue, la Delegación del Gobierno español en Nafarroa tuvo que pedir refuerzos policiales de otras comunidades, según reconoció el miércolesel propio Vicente Ripa a la agencia Efe.
A la hora en la que estaba prevista la movilización de Iruñea, la Policía actuó de manera contundente. El contingente policial cortó el acceso a los cientos de personas que desde la calle Mercaderes trataban de llegar a la Plaza del Ayuntamiento. El mando policial se dirigió al mahaikide de Batasuna Juan Cruz Aldasoro, al responsable de LABen Nafarroa, Santos Indakoetxea, y al abogado Jokin Elarre para comunicarles que el acto estaba prohibido.
Al otro lado de la Plaza, en la calle Saturnino, otro contingente policial impedía también el paso a quienestrataban de sumarse a la movilización.
Los argumentos que emplearon los convocantes fueron categóricamente rechazados por el mando policial: «Tienen cinco minutos para disolverse».
Mientras, los cientos de personas que esperaban manifestarse coreaban consignas como «Presoak kalera», «Alde hemendik, utzi pakean» o «Herriak ez du barkatuko».
Ante esta situación, los convocantes optaron por retroceder a la calle Mercaderes, donde Aldasoro se dirigió a los congregados subido a un banco para subrayar el éxito de la jornada de huelga y movilización en Nafarroa, «pese a las trabas que nos están poniendo la Policía española, la Guardia Civil, el Gobierno de Navarra y la patronal».
Aldasoro subrayó que «la izquierda abertzale está actuando con responsabilidad para poner en marcha un proceso que nos lleve a superar el actual conflictopolítico», por lo que hizo un llamamiento a los gobiernos español y francés y al resto de agentes vascos a «actuar con la misma responsabilidad».
Posteriormente, comenzaron una manifestación subiendo por la calle Estafeta tras una pancarta con el lema «Dispertsiorik ez. Konponbide demokratikoaren alde», pero se toparon con otra dotación antidis- turbios que les impidió el paso y les hizo retroceder de nuevo hasta Mercaderes, donde se produjo la primera carga.
En esos momentos, los manifestantes se dispersaron por las calles Mañueta, Navarrería y Curia, mientras algunos jóvenes arrojaban piedrasa los policías, que respondieron con pelotas de goma.
Las carreras se repitieron en numerosas ocasiones, ya que los policías cargaban en cuanto se agrupaba un número significativo de personas o escuchaban un grito de «Presoak kalera» o «Euskal presoak Euskal Herrira».
Es el caso de un grupo de estudiantes que trató de agruparse en la Plazadel Castillo. Fue inmediatamente disuelto por la Policía mientras coreaban gritos de «Euskal presoak etxera».
En el Paseo de Sarasate, en la acera central habían colocado un policía con casco y lanzapelotas cada tres metros.
Tambien tafalla y lizarra
En Lizarra, la carga que realizó la Guardia Civil en la Plaza de los Fueros fue calificada como «brutal» por testigos presenciales que relataron lo sucedido a GARA. Unas 150 personas estaban participando en una manifestación cuando intentaron entrar en la Plaza de los Fueros, que celebraba el habitual mercadillo de los jueves. En ese momento, la Guardia Civil comenzó a cargar provocando tres heridos que tuvieron que ser hospitalizados. Uno de ellos tiene una herida en la cabeza y otro, que fue inicialmente atendido en el ambulatorio y posteriormente trasladado al hospital debido la gravedad de las lesiones, tiene afectado el hígado. Asimismo, también resultaron lesionadas personas de avanzada de edad que estaban en el mercadillo.
La Guardia Civil detuvo a una persona mientras estaba siendo atendida en una ambulancia. El instituto armado le acusa de «resistencia, desórdenes públicos e insultos». Por la tarde hubo otra carga.
Miembros de la izquierda abertzale de Lizarra se entrevistaron incluso con la alcaldesa de la ciudad, María José Fernández (presidenta del PSN), para mostrarle su malestar, a lo que respondió, según transmitieron a GARA, que «hay que cumplir con la legalidad».
En Tafalla, en cambio, la alcaldesa, Maite Mañú (también del PSN), se dirigió a la Guardia Civil para tratar de que dejara de cargar contra los congregadosen la Plaza de Na- varra, según informó la plataforma abertzale Tafallaberri.
«Sin embargo, lejos de atender las peticiones de la alcaldesa, el mando dijo con actitud despectiva que no tenía nada que hablar con ella, y ante su insistencia le contestó que en Tafalla mandan ellos y no la alcaldesa», relató la plataforma abertzale.
La carga de la Guardia Civil se saldó con tres personasdetenidas, que tuvieron que ser atendidas en el centro de salud de Tafalla. Una de ellas tenía rotos los huesos de la nariz, por lo que tuvo que ser atendida en el hospital cuando fue puesta en libertad juntos a los otros dos arrestados.
La Guardia Civil también cargó contra 40 personas en Irurita después de que obligar al centenar que se reunió en Elizondo a dividirse en grupos de 20 y realizar identificaciones. A la tarde, volvió a disolver una concentración en Elizondo. En todo momento, im- pidieron grabar imágenes.
Identificaciones
Además de los detenidos en Tafalla y Lizarra, otras cuatro personas fueron arrestadas en Antsoain «tras ser denunciados por integrar un piquete coactivo», según señaló la Delegación del Gobierno, que seguía hablando de «normalidad» pese a que el balance de detenidos ascendía a ocho personas. Además, otras 17, según la propia Delegación, fueron denunciadas por «participar en una concentración ilegal». Trece de ellas lo fueron en Izize (Zaraitzu), dos en Elizondo y otras dos más en Olazti, donde cargó contra 40 personas por la tarde. En Aurizberri, además, identificó a los 18 vecinos que se concentraron.
En Iturrama, la Policía cargó por la mañana contra el centenar de alumnos del instituto e identificó a algunos profesores, mientras que al mediodía trató de entrar al patio. También cargó en Arrosadia (40), Burlata (50) y Txantrea (70) y la Guardia Civil lo hizo en Berriozar y Noain (17). El miércoles la Policía identificó a quienes portaban la pancarta, que fue requisada, en una movilización de 30 personas en Errotxapea. La Policía española también intervino en Atarrabia, donde rodeó a 25 perso- nasque estaban realizando una concentración. A una le requisaron varias octavi- llaspor la movilización. El argumento era que se trataba de «un arma», según relataron testigos. -