La repentina muerte de María José Urruzola Zabalza supone un duro golpe para sus conmilitonas del Partido Feminista de Euskadi y Lanbroa, movimientos en cuya formación participó activamente, al igual que lo hizo desde 1975 en el activismo feminista. Son muchas las voces que definen a esta irundarra como una teórica de referencia en el feminismo autónomo vasco y europeo, que le llevó a lo largo de su vida ­truncada el pasado viernes por un fatal derrame cerebral­ a no cejar en la defensa de los derechos de la mujer. En los últimos tiempos, centró sus esfuerzos en la constitución de una plataforma contra la abolición de la prostitución.

Esta profesora de Filosofía y Etica, autora de 14 libros sobre educación y coautora de 13 publicaciones más, sin olvidar sus cientos de artículos ­el pasado 25 de noviembre, Día Internacional contra la Violencia de Género, publicaba en GARA un escrito bajo el título “Una consecuencia de la dictadura sexual”­, fue víctima hace unos meses de una campaña de desprestigio por parte de medios de comunicación de la derecha española, a los que se sumó el arzobispo de Toledo, a raíz de la edición por la Junta de Castilla-La Mancha de su ‘‘Guía para chicas’’, con la que trataba de aportar su granito de arena en la educación de las nuevas generaciones. A pesar de que la guía ha servido a docentes y alumnos desde 1992, los reaccionarios montaron esa tardía campaña, que cosechó el rechazo de amplios sectores, dado el prestigio de una mujer con treinta años de experiencia en la educación para la igualdad. -