Piden «úteros de alquiler» para casos excepcionales
El jefe del Servicio de Medicina de la Reproducción del Instituto Universitario Dexeus, Pedro Barri, que consiguió el primer bebé probeta en el Estado español, reclamó ayer en la capital donostiarra que, en «casos excepcionales», se autorice el alquiler de úteros para algunas parejas con graves problemas de fertilidad.
DONOSTIA
El jefe del Servicio de Medicina de la Reproducción del Instituto Universitario Dexeus, Pedro Barri, consideró ayer que la nueva Ley de Reproducción Asistida es «muy realista y adaptada a la situación actual». No obstante, señaló que la misma debería contemplar la maternidad de sustitución, conocida como «útero de alquiler» en casos excepcionales, que «deberían de ser analizados y evaluados de manera individual por Comisión Nacional o por el Ministerio de Sanidad».
Barri, considerado el «padre» del primer bebé probeta en el Estado español, realizó ayer estas declaraciones en el transcurso de una rueda de prensa en Donostia con motivo de la celebración mañana de unas jornadas en las que expertos ginecólogos debatirán sobre las novedades y los retos de la ginecología y obstetricia.
El doctor manifestó que la nueva Ley de Reproducción Asistida, aprobada el pasado día 11 de mayo, «es muy realista y adaptada a las necesidades médicas» y, además, está «más avanzada» que la de algunos países europeos como Italia y Alemania.
En ese sentido, subrayó que, actualmente, el 15% de las parejas que desean tener hijos «no pueden concebirlos de manera natural» por lo que en el Estado español hay alrededor de 600.000 parejas con problemas de reproducción.
Barri explicó que la nueva legislación permite la utilización de semen y óvulos de donantes anónimos o el uso del diagnóstico genético preimplantacional, una técnica reproductiva que, en los casos de progenitores portadores de algunas enfermedades genéticas, permite implantar en el útero «embriones sanos y libres de las patologías de sus padres».
Otra de las novedades es la creación de un registro de la actividad de todas las clínicas en las que se realizan técnicas de reproducción, de modo que la nueva ley «pondrá sobre la mesa y dará luz» a toda la información que servirá para que «las parejas acudan a centros en los que se cumplen los estándares de la buena práctica».
Además, por primera vez se tratará de evitar los embarazos múltiples, porque se limita a tres los embriones en las fecundaciones in vitro. «Hasta ahora España tenía el triste honor de ser, junto a Italia y Portugal, uno de los países con una incidencia de embarazos múltiples más elevada, señaló el doctor para añadir que este tipo de embarazos tienen ‘‘un lado oscuro’’ al suponer un riesgo para la madre y para los recién nacidos».
Por último, afirmó que una mujer «menor de treinta años, sana y con relaciones sexuales normales», tiene que acudir al médico si en un año no ha conseguido quedarse embarazada, mientras que una mujer mayor de treinta años debería acudir en seis meses.
«Vamos hacia un crecimiento reproductivo más bajo»
Respecto a un posible aumento en los casos de infertilidad, este prestigioso doctor catalán precisó
que «la especie humana tiende a tener un crecimiento reproductivo más bajo»,
aunque matizó que esto se debe a que las parejas «tienden a reproducirse más tarde» y a que «hay una serie de factores tóxicos ambientales que repercuten en la fertilidad
como dioxinas, contaminantes atmosféricos y pesticidas». -
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