- Vuelta a Asturias
Samuel Sánchez fue profeta en su tierra a lo grande
·Se adjudicó la victoria en la tercera etapa tras una larga escapada en solitario
GIJON
El asturiano de Euskaltel Samuel Sánchez se adjudicó la tercera etapa de la Vuelta a Asturias al culminar con éxito una larga escapada que permitió al ovetense entrar en solitario en la meta de Gijón. Sánchez logró, por fin, la victoria en casa que tanto había buscado en años anteriores y firmó su tercera victoria de la temporada tras las dos etapas en la Vuelta al País Vasco y la séptima de su carrera profesional.Los 162 kilómetros entre Cangas del Narcea y Gijón se convirtieron en una auténtica pesadilla para el líder de la prueba Oscar Sevilla (T-Mobile). El Comunitat Valenciana intentó sorprender al corredor de Osa de Montiel desde El Roncal, primer alto de la jornada de segunda categoría, sin demasiado éxito. Los de Vicente Belda, que optan al maillot de líder con Eladio Jiménez, sacudieron de nuevo el pelotón en la primera meta volante del día para obtener segundos de bonificación, pero Sevilla volvió a responder a la perfección e incluso se permitió bonificar por delante del propio Jiménez. No obstante, los incesantes ataques en la subida al Roncal marcaron el signo de la etapa, ya que ocho corredores con el séptimo clasificado Daniel Moreno (Relax) y el propio Samuel Sánchez entre ellos formaron la fuga de la jornada.
El arte del descenso
Tras coronar la cima, Samuel Sánchez decidió salir del grupo en el descenso, faceta en la que se desenvuelve como nadie. El asturiano logró coger unos metros y comenzó su batalla particular en busca de la llegada a Gijón. Por detrás, el T-Mobile no tuvo más remedio que ponerse a trabajar para disminuir la renta de tres minutos que había cogido Daniel Moreno, líder virtual de la carrera.Visto el control que habían impuesto lo alemanes en el grupo principal, Moreno decidió descolgarse de la fuga, decisión que resultó clave para que los escapados gozaran de total libertad para luchar por la victoria de etapa. Para entonces, Samuel Sánchez ya había incrementado su ventaja sustancialmente y los últimos kilómetros se convirtieron en un paseo triunfal por las calles de Gijón.
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